Tres juzgados civiles distintos autorizaron avanzar a la liquidación forzada de la Universidad La República (Ulare). La casa de estudios debe a ocho exempleados más de $650 millones.
La entidad, fundada en 1988 y ligada a la masonería, ha estado en crisis por más de un lustro. En 2019, la Superintendencia de Educación detectó morosidad comercial, protestos impagos e incumplimiento de obligaciones laborales y previsionales, junto con una baja en la matrícula.
Así, inició un proceso que incluso llevó a que el Consejo Nacional de Educación aprobara por unanimidad revocar el reconocimiento oficial de la entidad y cancelar su personalidad jurídica. Aunque en 2022 la Corte Suprema detuvo el cierre al acoger un recurso de queja interpuesto por la universidad, la entidad sigue en medio de una crisis financiera.
Su rector, Fernando Lagos, comenta que espera que ingrese dinero durante la semana subsiguiente y llama a la calma: “Jamás se ha dejado de prestar el servicio educacional, y eso ha permitido que en estos cuatro años tengamos del orden de los 2.778 alumnos titulados”, asevera.
Liquidador nombrado
Con 830 alumnos actualmente, la Universidad La República enfrenta nuevamente las consecuencias de su crisis. La casa de estudios ha sido objeto de numerosas demandas laborales, de cobranza y juicios civiles en los últimos años.
Ahora, uno de los casos escaló al punto de que ya hay un liquidador nombrado. Se trata de un juicio sustanciado en el 19º Juzgado Civil de Santiago.
En él, dos extrabajadores —la terapeuta Macarena Mellico y el técnico en enfermería Paulino De La Campa— solicitaron que se les pagara lo adeudado por sus despidos, según se había acreditado en los respectivos juicios laborales.
Entre las obligaciones pendientes están remuneraciones, indemnizaciones sustitutivas del aviso previo y por años de servicio, pago de feriados y cotizaciones. $92.454.284 entre ambos.
El pasado 9 de junio la jueza Jacqueline Benquis resolvió avanzar hacia la liquidación. Por ello, solicitó a la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento designar un liquidador, lo que la institución cumplió el pasado 15 de julio, cuando designó a Raúl Cornejo Mendoza para el cargo.
Ahora, sólo falta que la magistrada dicte la resolución de liquidación respectiva.
Otros dos procesos civiles
Sin embargo, existen otros dos juicios con las mismas características, de extrabajadores que ganaron demandas laborales ante la Ulare y ahora buscan el pago de lo que se les adeuda.
En el primer caso, ante el 15º Juzgado Civil de Santiago, se trata de dos exempleados, que demandan $120 millones en total. En el segundo, en el 29º Juzgado, son cuatro extrabajadores que exigen más de $437 millones.
En los tres procesos, el representante de los trabajadores es Pedro Eguiguren, del estudio Eguiguren Abogados.
“Estamos esperando al primer tribunal que dicte la resolución de liquidación. Una vez eso ocurra, los que estén en otros juzgados se van a acoplar a ese proceso”, explica Eguiguren. Hasta el momento, todo apunta a que sería el 19º el primero en dictar dicho acto, ya que es el que está más avanzado.
Ante la inminencia de la resolución de liquidación, la universidad informó a la Superintendencia de Educación. En respuesta, el organismo le solicitó los registros académicos, para proteger los antecedentes.
De acuerdo a la información entregada, la universidad cuenta con 540 alumnos vigentes y otros 284 esperando titularse.
A la espera de los recursos
En conversación con BBCL Investiga, el rector de la universidad, Fernando Lagos, responsabilizó a la gestión anterior por este nuevo episodio.
–Hemos tenido avanzadas conversaciones también con el abogado patrocinante en esta causa, también información que hemos proporcionado respecto de la
posibilidad ya cierta de que la semana del 11 de agosto el socio financiero pueda ingresar los recursos comprometidos para la universidad y hacer frente a esta compleja situación que hemos vivido –explica el rector.
–En uno de los juicios ya se nombró un liquidador pero no se ha dictado resolución. Considerando eso, ustedes tienen que hacer ese trámite antes de que se dicte la liquidación.
–Sí, aunque siempre es cuestión de los recursos que se puedan interponer, respecto a esa resolución. Estamos confiados, sí, que el dinero comprometido ingrese antes de esa oportunidad para pagar. Esta administración arrastró las consecuencias de una muy mala administración anterior que nos dejó comprometidos con un montón de deudas, todas las cuales hemos ido superando y esperemos que esta también la podamos hacer.
–¿En qué situación se encuentra ahora educacionalmente la universidad?
–Hoy en día todos nuestros alumnos tienen un avance académico importante. No hemos hecho admisión desde 2021. Tomamos la decisión de no hacerlo mientras no tuviéramos la seguridad de que el ingreso de un socio financiero nos permitiera sacar adelante el proyecto. Esperamos el próximo semestre presentar un plan de mejora al Consejo Nacional de Educación, y luego que este se apruebe podríamos volver a realizar admisión.
Lagos prefirió no entregar detalles aún sobre la identidad del socio financiero, quien pasaría a ser el controlador de la universidad.
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