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Mitómano ataca otra vez: ahora logró que Corte obligara a Boric a responder por lonco Jones Huala

Jueves 13 octubre de 2022 | 09:56

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Camila Menickent (BBCL)

Una vez más el Estado deberá movilizar dineros públicos para ofrecer respuestas a Juan José Soto Vargas, reconocido mitómano que ha timado desde canales de televisión hasta la policía. Si antes fue la Corte de Apelaciones de Concepción, hoy la que exige cuentas al Presidente, Carabineros y la PDI es la de Valdivia. Todo como consecuencia de un recurso de amparo ingresado por quien un día incluso fingió su muerte por la TV nacional. Pese al largo historial de mentiras de Soto Vargas, el magistrado y presidente del tribunal de alzada valdiviano justificó la tramitación de la acción legal. "Uno de los pilares y principales mandatos del Poder Judicial es garantizar el acceso a la justicia de todas las personas", argumenta.

Juan José Soto Vargas lo hizo de nuevo. Luego de que a comienzos de septiembre recién pasado hiciera pasar un bochorno a la Corte de Apelaciones de Concepción por el caso de Ernesto y Héctor Llaitul, este martes el reconocido mitómano consiguió que el tribunal de alzada de Valdivia acogiera a trámite un insólito recurso de amparo en favor de Facundo Jones Huala, lonco mapuche prófugo de la justicia desde hace ya ocho meses.

¿El resultado de su última jugarreta judicial? La PDI, Carabineros, el Juzgado de Letras y Garantía de Río Bueno y el propio Presidente de la República, Gabriel Boric, deberán movilizar dineros públicos para ofrecer respuestas a quien llegó a fingir su propia muerte en la TV nacional.

Todos ellos, por orden de la Corte, tienen un plazo de 48 horas para hacer llegar sus informes “con todos los antecedentes que obren en su poder” respecto del líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), condenado como autor de un ataque incendiario ocurrido en enero de 2013 a un predio de Pisu Pisue, en la región de Los Ríos.

De no hacerlo, se arriesgan a sanciones.

“Cacería humana”

La última jugada de Soto Vargas fue ingresada el viernes recién pasado a la Corte de Apelaciones de Valdivia. El escrito, en buen chileno, no tiene patas ni cabeza.

A lo largo de 10 páginas, con numerosos errores de ortografía y sinsentidos, el hombre con un abundante historial de engaños a cuestas, acusa una supuesta “cacería humana” en contra del líder de la RAM.

El documento comienza con una introducción del recurrido, a quien presenta como un “ciudadano trinacional, chileno, argentino, y lonco mapuche, plurinacional”.

A renglón seguido, llama a los magistrados del tribunal a informarse del caso de Jones Huala. “Sírvase de abrir y leer las noticias y portales por gentileza”, se lee en el encabezado, aunque sin adjuntar vínculo alguno.

Lea el recurso

Paradójicamente, lo que sí incorporó a la tramitación de la acción judicial es medio centenar de archivos de prensa donde él aparece como protagonista, además de supuestas condecoraciones recibidas a manos de autoridades de Argentina, país donde dice residir.

Así, sin dejar en claro las vulneraciones por la que estaría atravesando Jones Huala, Soto Vargas expresa sus motivos para interceder en favor del lonco: “Lo hago por motivos humanitarios, religiosos”, lanza, para más tarde lamentarse por “el sufrimiento humano que viene padeciendo” el líder de la RAM, debido a “una persecución internacional de pais en pais, chile, y argentina, donde actualmente esta oculto (sic)”.

A su juicio, “si cometio algun delito, ya esta pagado mas que lo suficiente (sic)”, añade en el documento. Ello, pese a que Jones Huala debía cumplir, antes de su fuga, condena hasta 2024.

Vea los archivos adjuntos

Decisión del tribunal

Teorías conspirativas y divagaciones aparte, el recurso de amparo fue finalmente acogido a trámite. La decisión está firmada, en solitario, por el presidente de la Corte de Apelaciones de Valdivia, Luis Aedo Mora.

En su decisión, fechada este martes, el magistrado otorgó un plazo de 48 horas a los recurridos, incluido el Mandatario Gabriel Boric, para remitir “todos los antecedentes y documentos que al respecto obren en su poder”.

Fuentes consultadas por este medio apuntan a que los asesores del Jefe de Estado ya alistan la respuesta ante el tribunal de alzada valdiviano. Aunque, dejaron entrever su molestia por la movilización de recursos que significa acoger este tipo de amparos, a riesgo de ser sancionados en caso de no hacerlo.

Requerido por la Unidad de Investigación de BioBioChile, el magistrado Luis Moisés Aedo Mora, comenta que “uno de los pilares y principales mandatos del Poder Judicial es garantizar el acceso a la justicia de todas las personas, en igualdad de condiciones; y esto lo hacemos sin cuestionar el historial previo de los intervinientes, que por lo demás, sería muy difícil de conocer dado el volumen de causas que tramita anualmente el tribunal de alzada”.

“Bajo esta lógica, un recurso de amparo adolece de examen de admisibilidad ‘a priori’, precisamente por competer a materias de cautela constitucional de urgencia, ligadas a la tutela de las garantías de libertad personal y seguridad individual de las personas”, asevera.

Falso cónsul, falso canciller

Tal como publicó BBCL Investiga a comienzos de septiembre de este año, el expediente de jugadas judiciales de Soto Vargas se remonta a 2005. Desde entonces y hasta la fecha, la Corte Suprema registra 124 recursos de amparos interpuestos por él.

De las 17 Cortes de Apelaciones de Chile, 13 tienen registros de su nombre, incluidas Punta Arenas y Arica. El mismo Soto Vargas dice que son más de 400. Por si fuera poco, también ha timado a medios de comunicación.

En su largo historial de mentiras pasó de ‘representante’ del narco mexicano Chapo Guzmán, a ser un “canciller” de Argentina que embaucó a Carabineros para obtener información de su ex. Y luego, hasta se dio por muerto durante un contacto en directo con TVN para revivir más tarde con nuevos engaños (ver primer reportaje).

Si bien su última maniobra fue respondida -al igual que otras tantas- existe un alto porcentaje de sus acciones judiciales que terminaron rechazadas y declaradas inadmisibles. Las razones son varias: porque no corresponde al territorio jurisdiccional correcto o porque los hechos expuestos no tienen ninguna relación con la realidad. En otras palabras, más mentiras.

La Corte de Apelaciones de Arica, por ejemplo, le rechazó una solicitud porque los antecedentes que expuso estaban totalmente fuera de contexto, pero principalmente, porque personal especializado de la prefectura de Extranjería revisó fuentes de información abiertas y determinó que el amparado Juan José Soto, era un reconocido mitómano.

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