Aunque la Reserva Federal de Estados Unidos se mantuvo dentro de las expectativas con el incremento de 75 puntos en los tipos de interés, las consecuencias de este ajuste se dejaron sentir en los mercados globales, de la mano del temor a una recesión en EEUU. Los principales índices de Wall Street retrocedieron entre 2,4 y 4%. En Chile, el IPSA cayó en 2,14%.
Y es que el alza de tasas que se va a mantener durante este año –no sólo en EEUU- afectará a la economía. Ayer, el mercado pudo digerir la decisión de la FED, con lo cual la divisa norteamericana volvió a subir hasta los $868. Un salto de más o menos seis pesos, pero que, según el ministro de Economía, Nicolás Grau, no debe generar alarma.
Esa hipótesis la comparten los expertos, quienes creen que la reacción de los indicadores tiene que ver sobre todo con incertidumbre, porque no hay todavía luces respecto del futuro de la inflación. Van a ser cruciales los siguientes datos en EEUU, según destaca Felipe Ruiz de BCI Estudios. Mientras que Juan Ortiz, del OCEC UDP, también pone el énfasis en la caída del cobre, que acumula seis jornadas consecutivas a la baja, por una posible menor demanda en China.
La gran preocupación para la economía nacional tiene que ver con la presión que genera un tipo de cambio más alto sobre la inflación, donde un 60% de los productos de la canasta básica son importados. Algo que afecta, por ejemplo, al precio que se paga por el petróleo. Por eso, las bencinas volvieron a anotar un incremento ayer, y ya acumulan alzas de más de $400 pesos, en el caso de la de 93. Pero además hay una particularidad: comenzaron a operar las nuevas bandas de precio del MEPCO, algo frente a lo cual el ministro de Energía, Claudio Huepe, llamó a esperar las caídas del precio.
¿Cuándo pueden bajar los precios?
Hay un efecto a la baja, por ejemplo, asociado al alza en las tasas de interés. Las tasas han subido en EEUU, en Europa, también en Sudamérica y eso afecta la demanda. Sin embargo, los barriles de petróleo están en torno a 120 dólares y, según las autoridades rusas, podrían subir a 150 a fines de año.
La apuesta es que los precios se estabilicen por una menor demanda, como señala Carlos Smith de la UDD, o que los países productores puedan ajustar su producción, una solución que podría ser política, tal como afirma Luis Gonzáles de Clapes UC.