El presidente Gabriel Boric y la ministra del Interior, Izkia Siches, condenaron los actos de violencia registrados en el sur del país y respaldaron el rol de las Fuerzas Armadas en el control del orden público.
En la oposición pidieron mano dura al Ejecutivo y cuestionaron la aplicación acotada del Estado de emergencia, mientras que en el oficialismo no hay consenso sobre la ampliación de esta herramienta.
Arauco tiene una pena. Así, recordando a Violeta Parra, comenzó el discurso del presidente Gabriel Boric en el aniversario número 160 de la Gran Logia de Chile, donde se refirió a los ataques y actos de violencia que se cometieron en el sur del país.
El mandatario insistió en que la violencia no es el camino y reiteró que el Gobierno tiene el deber de hacer valer el imperio de la ley.
Luego de que se confirmara la muerte del trabajador baleado en Lumaco, la ministra del Interior, Izkia Siches, condenó los hechos de violencia y envió sus condolencias a la familia de Segundo Catril Neculqueo.
En la oposición aprovecharon el ataque en Lumaco para acusar a La Moneda como principal responsable de que la violencia no cese en La Araucanía.
La senadora por la zona, Carmen Gloria Aravena, pidió que el Gobierno actúe y deje las declaraciones, mientras que el presidente del Partido Republicano, Rojo Edwards, sostuvo que el comunero asesinado es una nueva víctima de la ceguera del Ejecutivo.
Consenso hay en la oposición respecto de ampliar el estado de excepción -que deje de ser acotado- y de prorrogarlo. Sin embargo, en el oficialismo no ocurre lo mismo.
El senador del PS, Fidel Espinoza, sostuvo que el actual escenario de emergencia no responde a la necesidad de seguridad, por lo que habría que ampliarlo, mientras que su símil de la DC, Matías Walker, afirmó que seguirán tramitando el proyecto de infraestructura crítica.
En Apruebo Dignidad mantienen su rechazo al estado de excepción de emergencia. Tanto el presidente del PC, Guillermo Teillier, como su símil de Acción Humanista, el diputado Tomás Hirsch, aseguraron que -ojalá- esto dure lo menos posible.
Fuentes de La Moneda, frente a este tema, la ampliación del estado de excepción de emergencia, señalaron que aún en su versión ampliada no hubiese existido presencia militar en la zona del ataque, ya que -por decisiones operativas- no se envían efectivos allí.
Y sobre la protección de infraestructura crítica, en el Gobierno afirmaron que una faena forestal no sería considerada como tal.