A partir de las 13:00 horas y hasta total despacho, la Sala del Senado discutirá y votará en general y en particular la Pensión Garantizada Universal, y el informe financiero del proyecto.
Ambas iniciativas fueron despachadas de las Comisiones de Trabajo y Hacienda con apoyo transversal de las fuerzas políticas, y desde el oficialismo piden una señal aprobando con amplia mayoría.
En la oposición, reconocen que hay un salto de fe confiando en las cifras entregadas por el gobierno, a partir de serios cuestionamientos por la recaudación de la fórmula aprobada.
El Senado convocó a una sesión especial hasta total despacho esta tarde, para discutir y votar en general y en particular tanto la Pensión Garantizada Universal, como el informe financiero de la iniciativa.
Tras su paso por las comisiones de Trabajo y Hacienda, el proyecto incorporó a cerca de 56 mil personas al beneficio a través de los pensionados de invalidez, creó un subsidio para niños y niñas con discapacidades mentales y físicas severas, y automatizó la entrega del beneficio.
En lo financiero, hubo un aumento del costo al 0,98 del PIB, y pasó de tener un 0, 35 del presupuesto por vía de exenciones tributarias y nuevos impuestos, a un 0, 67 proyectado por el gobierno.
Se espera que esta tarde la Comisión de Hacienda informe algunas adecuaciones de redacción del proyecto que no quedaron zanjadas, además de precisar qué embarcaciones quedan afectas al impuesto del 2% al lujo.
La Presidenta del Senado y de ese comité, Ximena Rincón se refirió a los temas pendientes y ratificó que el acuerdo entre ambos gobiernos y el senado, permitió sacar el impuesto a los súper ricos de la iniciativa.
En lo político, la PGU no corre riesgo de aprobarse y despacharse a la cámara, pese a que los quorum en la votación en particular van a variar, y se esperan algunas abstenciones y votos en contra en la oposición.
Sin embargo, el llamado del oficialismo es a dar una señal de un respaldo transversal del Congreso, como el que el senador UDI, Juan Antonio Coloma.
Una sensación que se repitió en el trabajo de comisión, es que muchos de los nuevos ingresos que están contabilizados en el proyecto, son a partir de cifras del gobierno de las que mantienen dudas, o derechamente, de tributos que aún no tienen un aporte definido asociado.
El senador del PS, Carlos Montes, fue quien más exhibió estas objeciones el jueves e incluso, en su última intervención, dijo que estaban dando un salto de fe.
El próximo ministro de Vivienda, dijo que los recursos conseguidos por el informe financiero son muy discutibles.
En la misma línea de Coloma, el Senador RN de la Comisión del Trabajo, Rodrigo Galilea, dijo que el respaldo de ambas comisiones, debe convertirse en un apoyo mayoritario de la sala, a una iniciativa que ya no debería sufrir grandes cambios.
Quedó en el camino el royalty minero, el impuesto a los súper ricos, la inclusión de los pensionados de reparación y el retiro del fondo de libre disposición, como propuesta tanto de financiamiento como de cobertura al proyecto.
El proyecto contiene una carga tributaria del 10% a las ganancias de capital, un nuevo impuesto del 2% a los bienes de lujo, la eliminación de la exención a las patentes mineras, un IVA a los servicios que excluye servicios esenciales, y una sobretasa a las viviendas de avalúo fiscal sobre los 900 millones de pesos.
De ser respaldado esta tarde, solo deberá saltar una última valla: El miércoles, en sesión especial de la Cámara de Diputadas y Diputados, antes de convertirse en ley.