Avanza proyecto de viviendas sociales en terreno de víctima de sicariato: "Hablamos de un barrio"

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Se trata de un hecho que conmocionó a la comuna de Concón en 2020, el asesinato del empresario Alejandro Correa a manos de un sicario contratado por una disputa de ocupación ilegal en un terreno que le pertenecía ubicado en Quilpué.

Mismo predio que hoy su familia busca donar a la comuna para la construcción de viviendas sociales junto a más servicios creando así un nuevo barrio y además contribuyendo a minorizar la grave crisis habitacional que vive la Región de Valparaíso.

Una iniciativa que nace del dolor familiar pero que busca generar justicia y cambiar de cierta forma el agrio recuerdo de la pérdida de este padre y esposo. A continuación revisa la entrevista completa a Valentina Correa en el Podría ser peor.

400 viviendas sociales y un barrio

“Venimos trabajando con la municipalidad de Quilpué, su equipo de Secretaría de Planificación para poder darle una transformación al terreno marcado por el dolor. Nos acoplamos a los intereses de la alcaldesa y de la comuna, que casi no tiene suelos para uso habitacional y este tipo de viviendas”, explicó.

Y agregó: “Siempre hemos estado de acuerdo en que el sueño de mi papá no puede quedar ahí en el lugar de una memoria familiar como algo tan traumático. Es empujar algo que fuera más trascendente que nos permitiera una sensación de justicia y es una buena señal para el país específicamente a la región de Valparaíso”.

Sobre la situación del terreno actualmente, señaló: “No existe una toma, si no que es más bien un tipo de condominio. El país está esperando una respuesta del Estado que fue fallida en un principio”.

“Son dos hectáreas donde un gran porcentaje contempla un parque, un anfiteatro, una granja educativa, senderos, junto a equipamiento municipal, un terminal de buses intercomunal que la alcaldesa quiere impulsar además de las 400 viviendas”.

E insistió: “De lo que estamos hablando es de un barrio. Es importante que sea liderado por la municipalidad de Quilpué que saben la realidad. Esto se transforma en un sueño de la comuna y presentamos el proyecto en el Consejo Regional”.

“Ahora viene un camino largo de filtros administrativos y coordinaciones con SERVIU. Hay un componente técnico que es sólido y nosotros vamos de articuladores como familia. Es emocionante como todos los sectores apoyan transversalmente este proyecto”, cerró.

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Se trata de un hecho que conmocionó a la comuna de Concón en 2020, el asesinato del empresario Alejandro Correa a manos de un sicario contratado por una disputa de ocupación ilegal en un terreno que le pertenecía ubicado en Quilpué.

Mismo predio que hoy su familia busca donar a la comuna para la construcción de viviendas sociales junto a más servicios creando así un nuevo barrio y además contribuyendo a minorizar la grave crisis habitacional que vive la Región de Valparaíso.

Una iniciativa que nace del dolor familiar pero que busca generar justicia y cambiar de cierta forma el agrio recuerdo de la pérdida de este padre y esposo. A continuación revisa la entrevista completa a Valentina Correa en el Podría ser peor.

400 viviendas sociales y un barrio

“Venimos trabajando con la municipalidad de Quilpué, su equipo de Secretaría de Planificación para poder darle una transformación al terreno marcado por el dolor. Nos acoplamos a los intereses de la alcaldesa y de la comuna, que casi no tiene suelos para uso habitacional y este tipo de viviendas”, explicó.

Y agregó: “Siempre hemos estado de acuerdo en que el sueño de mi papá no puede quedar ahí en el lugar de una memoria familiar como algo tan traumático. Es empujar algo que fuera más trascendente que nos permitiera una sensación de justicia y es una buena señal para el país específicamente a la región de Valparaíso”.

Sobre la situación del terreno actualmente, señaló: “No existe una toma, si no que es más bien un tipo de condominio. El país está esperando una respuesta del Estado que fue fallida en un principio”.

“Son dos hectáreas donde un gran porcentaje contempla un parque, un anfiteatro, una granja educativa, senderos, junto a equipamiento municipal, un terminal de buses intercomunal que la alcaldesa quiere impulsar además de las 400 viviendas”.

E insistió: “De lo que estamos hablando es de un barrio. Es importante que sea liderado por la municipalidad de Quilpué que saben la realidad. Esto se transforma en un sueño de la comuna y presentamos el proyecto en el Consejo Regional”.

“Ahora viene un camino largo de filtros administrativos y coordinaciones con SERVIU. Hay un componente técnico que es sólido y nosotros vamos de articuladores como familia. Es emocionante como todos los sectores apoyan transversalmente este proyecto”, cerró.