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El 31 de agosto del año 12 nació en Anzio, Italia, Cayo Julio César Augusto Germánico, conocido como Calígula. Su apodo proviene de las caligae, el calzado militar que usaba de niño, y que lo acompañó como una marca hasta convertirse en emperador romano entre los años 37 y 41.

El excéntrico emperador romano del año 37 al 41.

Casi todo lo que se sabe de su vida proviene de Suetonio y su obra Las vidas de los doce Césares. Allí se retrata a Calígula como un gobernante cruel, con una infancia marcada por la fascinación por el sufrimiento de los condenados y una vida adulta dedicada al exceso y la lujuria.

Los relatos lo muestran derrochando riquezas en banquetes extravagantes, construcciones desmesuradas y caprichos costosos, como beber perlas disueltas en vinagre o servir manjares condimentados con oro. También se le atribuye un carácter despótico, castigando incluso la lentitud en sus obras con la pena de muerte.

Suetonio además lo describe como un hombre de apariencia desagradable y salud frágil, con ataques de epilepsia y una obsesión por provocar temor. Entre sus excentricidades más recordadas está el cariño por su caballo Incitatus, al que le construyó una caballeriza de mármol y al que habría querido nombrar cónsul.

Los últimos años de Calígula estuvieron rodeados de escándalos, incluyendo relaciones incestuosas con sus hermanas. Finalmente, el 24 de enero del año 41, murió asesinado en una conspiración de senadores y pretorianos. Tenía apenas 28 años, dejando tras de sí una de las leyendas más oscuras del Imperio Romano.

En este video, Nibaldo Mosciatti nos cuenta la historia de Cayo Julio César Augusto Germánico, más conocido como Calígula, el excéntrico emperador romano del año 37 al 41.