El juicio FIFA, que hace más de un mes revela increíbles detalles del lujoso tren de vida de los magnates del fútbol latinoamericano, tuvo este jueves a su testigo más famoso, la estrella del pop Kevin Jonas, de la banda Jonas Brothers.

En otro sorprendente giro del proceso sobre la corrupción en el fútbol mundial, Kevin Jonas fue llamado por el gobierno estadounidense para atestiguar que asistió a un concierto del exBeatle Paul McCartney en Buenos Aires en noviembre de 2010.

Jonas estuvo presente en ese espectáculo en el estadio del club River Plate en la capital argentina, y en el mismo lugar, junto a sus hermanos, el actor, cantante y guitarrista estadounidense ofreció un concierto un par de días más tarde.

Otro testigo del gobierno estadounidense en el juicio FIFA, Santiago Peña, exempleado de la empresa de marketing deportivo Full Play, había indicado que Juan Angel Napout, expresidente del fútbol paraguayo y de la Confederación de Fútbol Sudamericana (Conmebol), recibió bajo el seudónimo “Honda” entradas para el concierto por un valor de más de 10.000 dólares, como parte de un soborno adicional de un millón de dólares por los derechos de transmisión de la Copa América 2015.

Los abogados de Napout han puesto en duda su testimonio, y no habían querido admitir ante el jurado que el concierto tuvo lugar. Por ello, el testimonio de Jonas cobra importancia al confirmar que sí se realizó.

“Cada vez que consigues ver a Paul McCartney es algo bastante especial”, dijo Jonas, de 30 años, que llegó a la corte vestido enteramente de negro y prestó testimonio durante apenas dos minutos y medio.

Napout es acusado de recibir sobornos a cambio de la cesión de derechos de la Copa Sudamericana, la Copa América y la Copa Libertadores, entre otros torneos. También es acusado de fraude bancario y lavado de dinero.