La vida de vueltas. Nunca sabes a ciencia cierta donde vas a terminar. A veces puedes estar en lo más alto de la rueda, otras en lo más bajo. De eso sabe Dong Fangzhuo, un futbolista chino que llegó a fichar por el poderoso Manchester United y que luego de entrar en un espiral de decadencia terminó sometiéndose a una cirugía estética en un reality show para cambiar su deteriorada imagen pública.
En 2004, siendo apenas un adolescente de 18 años, Fangzhuo acaparaba portadas en su país. El delantero despuntaba en la liga local y sonaba en clubes como el Real Madrid y el Inter de Milán, aunque fue finalmente el Manchester United el que consiguió su deseada ficha. Sir Alex Ferguson esperaba tener el mismo éxito que tuvo un año antes al fichar a un tal Cristiano Ronaldo. En China, un país alejado de la élite futbolística, estaban extasiados con su nuevo joya.
Dong Fangzhuo tuvo que esperar para su estreno con la casaca de los ‘red devils’, pues no contaba con un permiso de trabajo. Lo mandaron al Royal Antwer de Bélgica para que se fogueara y sintiera en carne propia el rigor del fútbol europeo. Allí confirmó sus pergaminos y se convirtió en goleador del fútbol belga. Todo pintaba bien, pero la cesión, que en teoría era por un año, terminó alargándose a tres. Recién en diciembre de 2006 llegó el tan anhelado permiso para poder jugar en pastos ingleses.
En Old Trafford lo esperaban jugadores de la talla de Rio Ferdinand, Cristiano Ronaldo, Paul Scholes y Wayne Rooney. Pero para poder jugar con ellos tuvo que esperar a mayo de 2007. Su debut fue en grande, saltó como titular nada menos que un derbi en Stamford Bridge ante el Chelsea multicampeón de José Mourinho en un partido que terminó igualado sin goles.
La siguiente temporada sería la de su explosión luego de seis meses de adaptación al ritmo frenético de la Premier, pensaron muchos, pero el chino no encontró lugar en una delantera estelar compuesta por CR7, Rooney, Carlos Tévez y Saha. Apenas participó en un encuentro por League Cup y otro por Champions League. Al United ya no le interesaba Fangzhuo. Para el club inglés estaba claro que el proyecto de crack se había estrellado en el escenario mundial. A la temporada siguiente ni siquiera le asignaron número de camiseta. Finalmente llegaron a un acuerdo para que el chino abandonara el club.
Con el objetivo de volver a sentir viejas sensaciones, esas que lo llevaron a estar en boca de todos, volvió a China, al club que lo lanzó al estrellato, el Dalian Shide. Pero algo se había roto dentro del atacante. En sus casi dos temporadas de vuelta en casa, no marcó ningún gol.
A pesar de su paúperrimo rendimiento, a Fangzhuo se le volvieron a abrir las puertas de Europa. El Legia de Varsovia, luego de tenerlo a prueba, le hizo un contrato por 18 meses. Pero tras solo cuatro partidos fue desvinculado del club polaco.
Cuando nadie mostraba interés por él, un ex compañero en el Manchester United salió en su ayuda. Cristiano Ronaldo recomendó a Fangzhou en el Portimorense. “Cristiano es fantástico, no sólo como futbolista sino también como compañero”, afirmó en su presentación el asiático. Las cosas no le van bien y parte rumbo a Armenia, corriendo la misma suerte.
Otra vez vuelva a China para terminar su carrera en 2014. Tenía solo 30 años. Los medios y los fanáticos se hicieron un festín con su decadente trayectoria y por el evidente sobrepeso del ariete. La sátira llegaría a niveles colosales este año, cuando Fangzhou fue a un reality show solicitando una cirugía que le ayudara a cambiar su imagen desmejorada y que así la gente parara de burlarse de él. Un nuevo rostro para un nuevo comienzo. Dong Fangzhou quiere dejar de ser Dong Fangzhou, el crack que no fue.
