¿Cómo mejorar la participación de los equipos chilenos en las competencias internacionales? Esa es una de las interrogantes que se ha propuesto resolver la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), encabezada por su presidente Arturo Salah, debido a los pésimos resultados que han conseguido los representantes locales en las últimas ediciones de Libertadores y Sudamericana.

La fórmula sería probada, y aseguraría un mejor resultado de las escuadras nacionales en este tipo de competencias. Entre los cambios de mayor consideración, estaría el de quitar la norma que impide la participación de un equipo en dos competencias durante un mismo año, es decir, se podría clasificar a Libertadores y Sudamericana y disputar ambos torneos.

Según destaca Emol, hasta la fecha, esta opción le daba oportunidad de participar en torneos internacionales a escuadras que alcanzan la medianía de la tabla, pero sin lograr muy buenos resultados en dichas competencias.

Con la vuelta a un torneo largo, que la ANFP espera aprobar para el próximo año, los cuatro primeros equipos de la tabla clasificarían a la Copa Sudamericana de 2017, esto, tras haberse jugado las quince fechas iniciales del torneo anual.

Terminado el año, el campeón del torneo nacional sería ‘Chile 1′ y accedería a la Libertadores 2018, en tanto el ‘Chile 2′ saldría del ganador de la liguilla en la que participarían del segundo al quinto ubicado en la tabla. Por último, el ‘Chile 3′ quedaría para el campeón de la Copa Chile, según apunta el citado medio.

Finalmente, en relación a la nueva calendarización, los clubes ya habrían recibido la propuesta de la ANFP con las modificaciones al actual sistema de campeonato, y contarían con dos semanas para evaluar la medida, según revela La Tercera.

El plan sería retomar un campeonato largo de 30 fechas entre febrero y diciembre, además de enfocarse en potenciar competencias como la Copa Chile y la Supercopa.

Asimismo y con objetivo de que el público vuelva a los estadios, se buscaría uniformar los campeonatos de Primera B y Primera División, para que su desarrollo sea más fácil de entender por la gente. Por otro lado, el segundo semestre de este año contemplaría un campeonato de transición y no habría descenso hasta 18 meses después del actual clausura.