Los minutos previos al encuentro entre Venezuela y Chile en Barinas no fueron muy gratos para los nacionales. Los rostros de los seleccionados expresaban un claro malestar luego de que el himno nacional no se escuchara y además, en plena ceremonia inicial, se encendieran los regadores del estadio.

Insólito. No se entendía nada del himno nacional cuando correspondía el turno para los dirigidos de Juan Antonio Pizzi, el audio de la música dejó bastante que desear y fue el primero de los malos ratos que vivió La Roja segundos antes del compromiso. Pero la situación no quedaría solo en eso, ya que los regadores comenzaron a funcionar inexplicablemente durante el desarrollo de la ceremonia inicial.

Ambas situaciones colmaron la paciencia de la delegación nacional, quienes no dudaron en expresar su malestar a los anfitriones.

El gerente de selecciones de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional, Felipe Correa, reclamó a sus pares de Venezuela inmediatamente después de ocurrido el episodio, que por lo demás, retrasó el inicio del partido debido a que los jugadores debieron realizar cambio de calzado ante el imprevisto.