Así como el cantante Eros Ramazzotti retó a Messi a convertir un gol imposible, en el Real Madrid se propusieron el mismo desafío, y Marcelo fue el encargado de ejecutarlo.

En la práctica del conjunto blanco previo al duelo ante la Roma por Champions, el brasileño sorprendió con un tremendo golazo a ‘tres dedos’, marcando desde un ángulo imposible.

Marcelo se paró detrás del arco y con una espléndida zurda mandó el balón directo a las redes gracias al potente efecto de su remate con disparó con la cara externa de su botín.