El pasado fin de semana se vivió una de las agresiones más fuertes que se ha visto en el fútbol en el último tiempo.

En medio de un partido por la Liga Amateur de Turquía, Mehmet Değirmenci de Sanayispor le propinó una feroz patada en la cabeza a Kayhan Karatas del Dallicaspor.

La acción de Değirmenci de produjo luego de ser expulsado por el árbitro tras cometer una infracción a Karatas. La decisión del juez no dejó contento al agresor, por lo que reaccionó de la peor forma propinándole el cobarde acto mientras el rival se encontraba en el suelo.

La víctima recibió nueve puntos de sutura y dijo que tuvo suerte de no sufrir mayor daño.

Gracias a Dios la patada fue cerca de la mandíbula. Si hubiese sido directamente en mi cara, me podría haber roto la nariz, dejarme ciego o romperme el cuello”, señaló, consigna Daily Mail.

Se informó que Değirmenci fue reducido de su equipo de manera permanente y que arriesgaría una pena de cárcel de tres años.