La gran fiesta del Benfica, campeón en Portugal, se vio empañada en la noche del domingo por los enfrentamientos entre aficionados y la policía que dejaron una multitud de heridos, según fuentes policiales.

Dieciocho policías resultaron heridos, en su mayoría leves, y veintiséis personas fueron detenidas en estos incidentes, según un balance suministrado este lunes por la policía, que no precisa el número de aficionados heridos.

Los enfrentamientos empezaron en la madrugada en la plaza del Marqués de Pombal, en el centro de Lisboa, donde miles de aficionados eufóricos celebraban el éxito de su equipo, certificado con el empate (0-0) ante el Vitoria Guimaraes.

Cuando la multitud empezó a entonar el himno del Benfica, un grupo de aficionados comenzaron a lanzar botellas, piedras y otros objetos en dirección a las fuerzas del orden, que los intentaron dispersar a golpe de porra.

“Fue un caos, creía que estaba en un ‘western’, es inaudito, los aficionados estaban sobreexcitados”, contó Rui Trindade, un joven lisboeta que asistió a las celebraciones.

La policía evacuó gran parte de la plaza, lugar donde los habitantes de la capital suelen celebrar los éxitos deportivos. La calma llegó sobre las 3 de la madrugada.

Los incidentes también tuvieron lugar cerca del estadio Afonso Henriques de Guimaraes (norte), después del partido entre ambos.

Unas imágenes que han incendiado las redes sociales muestran al aficionado del Benfica, José Magalhaes, de 43 años, siendo reducido a golpes por la policía delante de sus hijos, en estado de shock, de nueve y trece años.

El ministerio del Interior anunció la apertura de una investigación sobre estos incidentes, hechos que desataron la ira del presidente del Benfica, Luis Filipe Vieira.

“Hay que comprobar, si en ciertos momentos, se produjo un exceso en el uso de la fuerza por parte de los miembros de la policía”, dijo en un comunicado publicado en la página web del club.

Vieira también envió un mensaja a la “minoría” de los aficionados que provocaron los incidentes, exigiendo que sean “identificados y castigados; el fútbol no los necesita”.

El Benfica consiguió el domingo su segundo título liguero consecutivo, el 34º de su historia, algo que no ocurría desde hacía 31 años.

https://youtu.be/jzIER30BU5c