Inglaterra derrotó a Gales por 21-16 (8-16 en el descanso) en el partido de apertura del Torneo Seis Naciones de Rugby, disputado este viernes Cardiff, en el que la delantera inglesa arrolló a los locales tras el descanso.

Llevados en volandas por los 72.000 espectadores que llenaron el Estadio del Milenio y que cantaron el himno galés ‘Land of my fathers’, los Dragones Rojos comenzaron el partido buscando decididamente la victoria desde el primer minuto.

El premio llegó a los ocho minutos cuando el medio scrum Rhys Webb culminaba una gran jugada de Toby Faletau, saliendo por sorpresa de un scrum, para posar el balón en la zona de anotación inglesa.

Gracias a los puntos con el pie del full back Leigh Halfpenny, los galeses se colocaron 10-0 a los diez minutos de juego, provocando el delirio en las gradas del Millenium.

Los ingleses se presentaron en Gales con muchas bajas (Tuilagi, Farrell, Barritt, Morgans…), pero demostraron que su cantera es inagotable y uno de los noveles, el wing Anthony Watson (20 años, 4 selecciones) anotaba el try que metía en el partido al XV de la Rosa.

Los galeses pudieron mantener la ventaja al descanso gracias al acierto con el pie de Halfpenny y a un drop del medio apertura Dan Biggar en la última jugada del primer tiempo.

El inicio de la segunda parte fue un reflejo de lo que esperaba a los galeses. En un interminable ataque de una veintena de fases, la delantera inglesa fue ganando centímetro a centímetro hasta que Johnatan Joseph se zafó de dos rivales para posar el balón en la zona de marca.

Dos tries no concedidos

La defensa galesa se mostró incapaz de detener la ofensiva del pack inglés y los visitantes pudieron haber sentenciado el partido mucho antes, pero el árbitro francés Jerome Garces no concedió dos tries tras repasar la jugada por vídeo.

En la primera, James Haskell no logró el try porque tras zafarse de un defensor chocó contra un poste rival (61) y en la segunda, el referí no concedió el try de Dave Attwood por una pantalla previa de Nick Easter sobre un rival (75).

Los ingleses, que jugaron 10 minutos en superioridad por la amarilla a Jamie Cuthbert, acabaron llevándose la victoria gracias al juego de pie de George Ford (una conversión y dos penales en el segundo tiempo).

“Solo quería dar la vuelta al partido por los chicos”, declaró tras el encuentro Ford, nombrado el hombre del partido.

“El rendimiento, especialmente del pack, fue remarcable. Estuvimos cómodos en la primera parte, pero el inicio fue pobre”, añadió.

“Es increíble. No hay sentimiento más grandes que venir a Gales y ganar, probablemente a uno de nuestros mayores rivales”, concluyó exaltado.

El capitán galés, Sam Warburton, admitió la superioridad del rival: “Estamos muy decepcionados. No es el comienzo que queríamos. En la segunda parte nos costó mantener el ritmo e Inglaterra gue superiro en muchas fases”.

Inglaterra logra así un triunfo de impacto, no solo de cara al Seis Naciones que acaba de empezar, sino sobre todo penando en el Mundial que albergará a partir del 18 de septiembre.

En la segunda jornada de la Copa del Mundo (el 26 de septiembre), ingleses y galeses tienen una cita en Twickenham.

El sábado se disputarán los otros dos partidos de la primera jornada del torneo: Italia-Irlanda y Francia-Escocia.