En normal ver concursos en el descanso de los partidos, los cuales son protagonizados por aficionados quienes hacen lo posible por llevarse el gran premio que entrega el auspiciador.

La tradicional mascota de una marca, la tanda de penales o una carrera de obstáculos son parte de las competencias que deben superar ciertos y “privilegiados” hinchas, los cuales son escogidos entre la multitud para optar al premio.

Mientras los jugadores se encuentran en los vestuarios y los asistentes van por un café o una sopaipilla, son estos hinchas los que entretienen al resto de la galería con las peripecias necesarias para quedarse con el “pack parrillero”, la “canasta sorpresa” o una no despreciable suma de dinero.

En ese contexto, en la Superliga danesa de fútbol un aficionado del Randers fue invitado a participar de un concurso de entretiempo, el cual consistía en anotar un gol por un pequeño agujero dispuesto a metros de él.

El hincha no se intimidó por la tremenda dificultad de la prueba y con una tranquilidad y sutileza que solo los grandes poseen se paró frente al esférico y pateó en dirección al agujero.

La sorpresa fue gigante cuando el aficionado anotó el gol y todo el estadio aplaudió lo que había logrado aquel señor, pero lo mejor vino después, ya que por superar la prueba el fanático se llevó nada más ni nada menos que 10 mil euros (unos 6 millones y medio de pesos).

https://youtu.be/FOsajPeXTmA