El fin de semana se conoció la información sobre una posible candidatura de Harold Mayne-Nicholls a la presidencia de la FIFA, en una propuesta acercada por Michel Platini, mandamás de la UEFA, para competir en las próximas elecciones ante Joseph Blatter.

Más allá de lo llamativo del trascendido, la opción de que el chileno luche por la presidencia de la organización que controla el fútbol mundial tendría cierta posibilidad de concretarse: Mayne-Nicholls podría contar con el apoyo de los votos pertenecientes a Europa, basándose en el respaldo de Platini.

Pero, según recoge el diario El Mercurio, cercanos al directivo señalan que, de tomar la decisión de participar, preferiría tener el apoyo de la Federación Chilena de Fútbol. Una situación que ya asoma compleja por las diferencias que mantiene con el presidente del organismo, Sergio Jadue, a lo que se suma el que Chile es parte del bloque de la Conmebol, que ya ha manifestado su respaldo a la candidatura de Blatter.

Lo anterior, guarda relación con la estrategia para asegurar que Sudamérica mantenga la actual distribución de cupos para clasificar al próximo Mundial de Rusia 2018, que considera cuatro plazas y la opción de un repechaje.

Ese contexto, que no ha sido confirmado pero que asoma como el más probable, complicaría la decisión de Mayne-Nicholls, aunque versiones entregadas al medio afirman que podría intentar una presentación ante la organización sudamericana apelando a su pertenencia al continente y su cercanía con algunos de sus miembros, con quienes mantiene vínculos durante su labores previas en FIFA.