Es común que durante el embarazo disminuya la frecuencia de las relaciones sexuales en la pareja. Según los especialistas, esto se debe principalmente a la preocupación de correr algún riesgo en el periodo de gestación.
Asimismo, hay mujeres que no tienen ganas debido al estado físico o anímico que provoca el embarazo. No obstante, hay que dejar en claro que las relaciones sexuales son una opción y no una obligación.
“Si supiéramos todos los beneficioso que conlleva la sexualidad en el embarazo, no solo con la pareja, también masturbarte, tocarte y autocuidarte, lo haríamos más”, destaca la sexóloga Ana Sierra, al diario electrónico El País.
En este contexto, la especialista señala que el sexo en el embarazo “es bueno para la circulación, para el estado del ánimo, para liberar el estrés, para unirnos a la pareja, para querernos a nosotras mismas, para sentirnos más plenas”.
Sobre este caso, María de los Ángeles Ribary Domingo, especialista del área de obstetricia y ginecología, complementa que “el trabajo y la concienciación sobre el suelo pélvico hará que nuestras relaciones sexuales sean más placenteras”, algo que no todas saben.
La experta plantea que muchas mujeres tienen dudas sobre si pueden o no tener sexo durante el período de gestación. Principalmente se preguntan cómo pueden hacerlo y si hay riesgos.
Más beneficios que riesgos
De acuerdo a los especialistas, el primer paso para disfrutar del sexo con plenitud, es perderle el miedo. Aun así, es necesario tener en cuenta algunas contraindicaciones.
“Las relaciones sexuales durante el embarazo podrían presentar un riesgo y, por tanto, no ser recomendadas médicamente en gestaciones que cursan con sangrado y en las que existe riesgo de aborto, parto prematuro, placenta previa, etc”, explica la especialista en el área de obstetricia y ginecología.
A pesar de esos riesgos, la experta asegura que “no está demostrado que mantener relaciones sexuales aumente el riesgo de rotura prematura de membranas o parto prematuro en gestaciones de bajo riesgo”.
Cabe recordar que el bebé en gestación está protegido por el líquido amniótico del útero y sus músculos. Por otra parte, los movimientos de balanceo producidos por el acto sexual, podrían resultar relajantes para él, asegura. En este caso, la especialista enfatiza en que la relación entre madre e hijo, se traduce en que lo que es bueno para ella, también lo será para su bebé.
“El bienestar físico y psicológico de la mujer conlleva que afronte mejor el embarazo y disfrute de todo el periodo de gestación (…) El placer y el bienestar que genera la práctica sexual conlleva muchos beneficios, como por ejemplo sentirse deseada, la liberación del estrés y el placer; aspectos que a veces se olvidan durante el embarazo”, incide Ribary Domingo.
Del mismo modo, la sexóloga comenta que el orgasmo tiene una función energizante para las mujeres. “Si bien los hombres tras eyacular se sienten muy cansados y pierden esa energía sexual, en cambio a nosotras nos da un impulso de energía”, explica Sierra.
Superar la barrera del miedo
Como se mencionaba anteriormente, la principal acción para aprovechar estos beneficios, es superar el temor a hacerle daño al bebé y entender que una madre no deja de ser mujer por estar embarazada.
Frecuentemente la maternidad se asocia a límites y se ve a la mujer como alguien a quien se debe proteger. Sin embargo, la sexóloga enfatiza en que sigue siendo una persona con necesidades y deseos.
“Hay parejas que tenían muchísimo deseo por sus mujeres embarazadas, y ellas también se sentían más sexuales, también influidas por el subidón hormonal y de felicidad“, dice.
“Siempre se habla de que durante el primer trimestre no apetece tener relaciones sexuales por las náuseas, y del subidón del segundo trimestre, pero no hay que fiarse siempre de esto porque cada mujer es un mundo”, explica la sexóloga.
Finalmente, Ribary Domingo destaca que las mujeres pueden tener relaciones sexuales como lo hacían antes de encontrarse en ese estado. “Es decir, deben adoptar las posturas que mayor satisfacción le produzcan y para su mayor comodidad”, concluye la ginecóloga.
