Aunque a algunos aún tienen aprensiones e incluso les causa molestia, durante el último tiempo muchas personas han alzado la voz por la igualdad de oportunidades y derechos para hombres y mujeres.

Y así como el feminismo va cobrando fuerza, algunas marcas han decidido subirse al carro de esta lucha.

Este es el caso de Nike, que lanzó una nueva pieza publicitaria durante la transmisión de los premios Oscar en Estados Unidos, donde destaca la labor de varias mujeres deportistas con un potente mensaje en la voz de la tenista Serena Williams.

“Si mostramos nuestros sentimientos, nos llaman dramáticas. Si queremos jugar contra hombres, estamos locas. Si soñamos con tener las mismas oportunidades, deliramos”, comienza diciendo.

“Si defendemos algo, estamos desquiciadas. Si somos demasiado buenas, hay algo malo en nosotras y si nos enojamos, somos histéricas, irracionales o simplemente locas”, continúa.

La secuencia muestra históricas deportistas que han revolucionado sus disciplinas. Por ejemplo, considera el caso emblemático de Katherine Switzer, la primera mujer en correr la maratón de Boston, y también el de Becky Hammon, la primera entrenadora de un equipo de la NBA.

“Pero una mujer que corre una maratón está loca, una boxeadora, está loca. Una mujer clavando una pelota de básquetbol, está loca. Una mujer entrenando a un equipo de la NBA, loca”, dice en referencia a lo anterior.

“Una mujer compitiendo con hijab, haciendo historia en su deporte o haciendo por primera vez un double cork 1080…”, añade, para luego hacer una alusión a ella misma: “Ganar 23 grand slams, tener un hijo y volver por más. Loca, loca, loca”, puntualiza.

“Así que si quieren llamarte loca, está bien. Pero mostrémosles lo que las locas pueden hacer”, finaliza el spot.

Cabe destacar que este no es el primer comercial feminista de la marca. Hace unos meses estrenó otra pieza publicitaria en México titulada “Juntas Imparables”, la cual tenía un tinte abiertamente feminista.

En la secuencia, se veía a un grupo de mujeres corriendo decididas a través de un enorme atochamiento vehicular lleno de obstáculos físicos y sociales, desafiando primero a una madre enfocada en la apariencia de sus hijas, luego al acoso callejero -aparece un hombre que es increpado tras silvar a las corredoras- y finalmente a un cúmulo de hombres que menosprecian su fuerza y valor, pero luego deben ceder.

Si bien algunos consideran que estas piezas publicitarias responden a mero oportunismo de la empresa, lo cierto es que identificarse con una postura -que causa polémica- también implica arriesgarse a que una buena parte de sus seguidores, principalmente hombres, abandonen la marca.

De hecho, así ocurrió a inicios de septiembre pasado, cuando Nike lanzó una campaña protagonizada por el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick, quien protagonizó una polémica en 2016 cuando aún formaba parte de los San Francisco 49ers. En la oportunidad se negó a cantar el himno nacional y se arrodilló en protesta por los abusos policiales y de desigualdad racial en Estados Unidos. Ese episodio hizo que el deportista se ganara el repudio de los sectores más conservadores, quienes tomaron su acción como un insulto a la patria.

Por lo mismo, cuando Nike decidió reclutarlo como rostro, causó gran revuelo e incluso algunos detractores de Colin comenzaron a quemar sus prendas y zapatillas de la marca, llamando a no comprar nunca más artículos de la firma.

Pero en la otra vereda, muchos le dieron su apoyo, incluyendo a Serena Williams y LeBron James, destacando este gesto como un acto de valentía.