La publicidad, con sus pegajosos slogans y cifras de efectividad, ha hecho bien su trabajo a la hora de potenciar a los desinfectantes en spray como formas válidas para eliminar virus o bacterias y así prevenir enfermedades.
No por nada las redes sociales han hervido ante las fotografías de personas con carros de supermercados llenos de estos elementos, todo en medio de la pandemia por coronavirus Covid-19 que ya ha dejado cerca de 8 mil muertos en todo el planeta y que este martes gatilló el decreto de un Estado de Excepción Constitucional por Catástrofe.
No obstante, desde el mundo científico local se han alzado voces que echan por tierra los supuestos efectos de estos elementos, quienes también advirtieron que se deben extremar otras medidas de auto cuidado para evitar contraer el Covid-19.
Consultado por BioBioChile sobre si estos desinfectantes efectivamente ayudan a eliminar el nuevo patógeno originado en Wuhan, Ricardo Espinoza Araya, infectólogo de Clínica Las Condes, señaló que no son la medida más efectiva.
“Hay que recordar que esto es una infección de persona a persona. Por lo tanto si yo tengo un paciente que está tosiendo y tiene coronavirus, y la familia acaba de echar toneladas de algún desinfectante aéreo que está circulando en el aire, si ese grupo no se está cuidando, no tiene un metro de distancia, no se está lavando las manos, la verdad es que les aseguro que se van a enfermar”, señaló.
“Si la familia tiene un enfermo tiene que hacer un lavado de manos muy estricto antes de acercarse. A todo esto yo no me imagino que al enfermo lo dejen solo, por lo tanto cuando entren a la habitación yo me pondría una mascarilla, en ese caso es muy razonable”, añadió.
“Creo que es importante que las personas sepan que en los enfermos, además de excretarse a través de la tos, el virus se excreta por las deposiciones. Por lo tanto, ese baño creo que es importante que lo limpien ojalá que con cloro en forma acuciosa una vez al día y que nadie más lo use dentro de lo posible en la condición de la familia”, finalizó el especialista.
Con agua y con jabón
Una opinión similar a la del infectólogo tuvo María Cecilia Guzmán, bióloga experta en microbiología de aire, aguas y alimentos.
“Según las recomendaciones oficiales que nos llegan de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y todos los gobiernos nos indican que no están recomendados”, aseguró.
“Ellos recomiendan jabón, el más barato que podamos comprar y que forme mucha espuma; y agua para que justamente todo lo que son las partículas víricas se vayan”, agregó.
“Los otros tipos de desinfectantes… hay que ver mucho su composición. Por ejemplo, algunos además de tener alcohol tienen un componente que es anti hongos. Entonces ya ahí tenemos una mezcla que puede llegar a ser no tan eficaz para el caso particular del Covid-19″, detalló.
Sumado a lo anterior, Guzmán señaló que también se puede ocupar alcohol, pero al 60% o 70%; y cloro al 0,1%. Según dijo, el virus desaparecería en 60 segundos bajo esas concentraciones.
“Muchas veces la gente dice que va a comprar un jabón bactericida, por ejemplo. Bueno, como su nombre lo indica, estos son para matar bacterias, células vivas. Nosotros ahora estamos en la lucha en contra de un ser que no es vivo, que se considera como una partícula infecciosa”, precisó la experta.
“Entonces si yo le doy un jabón que dice bactericida, que me costó carísimo, probablemente no va a hacer nada”, adelantó.
En esa línea, recordó que el efecto que se busca en esta época de pandemia se puede encontrar de la mano del jabón común y corriente, el que idealmente forme una cantidad suficiente de espuma, la que va a ayudar a que el virus “se nos despegue de las superficies, sobre todo de las manos”.
“También va a favorecer que la cubierta de proteína que tiene el virus, que son como esas espinitas que se llaman espículas, que son las que posteriormente se van a pegar a los pulmones; se disuelvan, se desarmen o se desactiven”, dijo.
Guzmán también es jefa del área de investigación de AirLife Internacional, una empresa dedicada a la venta de proyectos de purificación de aire en una serie de contextos productivos, desde el comercial al industrial pasando por espacios públicos e incluso con dispositivos para los autos.
“Airlife es una tecnología que produce aire energizado. Es decir, el aire que nosotros respiramos que contiene oxígeno, nitrógeno, hidrógeno es energizado. Se lo hace pasar por el interior de un reactor y allí recibe descargas eléctricas para formar lo que se conoce como especies reactivas del oxígeno y del nitrógeno”, explicó.
Según su relato, los productos que ofrecen varían en envergadura y algunos necesitarán evaluación de parte de un equipo de ingenieros para velar por cumplir las necesidades de la persona o empresa que se interese en contratar el servicio.
En concreto, este sistema genera un conjunto de átomos y moléculas que son altamente reactivas, las que al encontrarse con gérmenes o virus los van a desactivar, rompiendo sus estructuras, tanto en el aire como en superficie.
Pese a ello, Guzmán quiso dejar en claro que la firma solo propone esta tecnología como una medida preventiva adicional y que ellos no afirman que vaya a solucionar por sí sola los problemas de contagio no solo de Covid-19, sino que también de otras enfermedades respiratorias.
“Lo importante es la acción de lavarse las manos de forma adecuada. Mojar primero las manos, después pasar el jabón, después emulsionar, fregar mucho las manos para que las partículas se despeguen. Luego hacer correr el agua de forma que se lleve todo lo que sean los virus que puedan estar activos en la superficie de las manos”, finalizó.
Al cierre de esta edición, el Gobierno de Chile mantiene en 238 el total de casos confirmados de coronavirus Covid-19 en el país.
