Una poco convencional práctica para curar la resaca se ha tomado de grandes eventos en Estados Unidos. Se trata del vitamin drips (goteo de vitaminas) que promete dar un despertar sin los clásicos problemas de haber pasado una noche bebiendo.
El costo por el tratamiento sería de 50 dólares (unos 35.000 pesos chilenos), cifra que es cobrada por “clínicas móviles” que cuentan con trabajadores. Son ellos quienes, mientras la gente bebe, salen en búsqueda de futuros clientes.
De acuerdo con el diario El País, la técnica surgió en los años 80 bajo el nombre de intravenous therapy (terapia intravenosa), y no es usada sólo para superar los efectos de la resaca, sino que también para quitar el agotamiento, la diarrea, una deshidratación e, incluso, una insolación.
Inicialmente, el método surgió para tratar a pacientes que padecen problemas intestinales, pero con el tiempo se masificó.
De hecho, según consigna el portal británico Daily Mail, Rihanna, Kelly Osbourne y Kendall Jenner son algunas de las celebridades que han utilizado el tratamiento alguna vez en su vida. No obstante, esta última debió ser internada luego de una reacción alérgica al suero.
¿Cura la resaca?
Básicamente, la resaca es un conjunto de síntomas que se originan por haber bebido mucho alcohol. Van desde confusión, cansancio, dolor de cabeza y molestias estomacales.
“El alcohol, entre otras cosas, deshidrata el cuerpo, aumenta la cantidad de orina que producimos, y reduce el nivel de azúcar en la sangre lo que te hace sentir hambriento, débil y enfermo. Y demás está decir el dolor de cabeza y la sed intensa, que sólo son una respuesta del cuerpo a la deshidratación”, explica la doctora Pabla Pérez de la Clínica Indisa.
Los especialistas aseguran que curarla es casi imposible. Este tratamiento se trataría sólo de un efecto placebo. “Las vitaminas ni quitan la resaca ni disminuyen los efectos del alcohol. Lo único que lo haría es potenciar la micción, inyectando un par de litros de suero fisiológico, para estimular al riñón y excretar parte del alcohol aún no metabolizado”, explica a El País el doctor Antonio Licitra, especialista en Medicina Estética.
Por lo demás, asegura que debe ser un método manejado sólo por especialistas. (Pueden existir) infecciones, toxicidad, alergias… no se puede inyectar a cualquiera. Se trata de un acto médico, y requiere de una historia clínica previa a través de la cual se detectan incompatibilidades o posibles alergias”, explica.
Por su parte, el doctor Zubair Ahmed del centro estadounidense MedicSpot detalla a Daily Mail que, “de manera más alarmante, también existe la pequeña posibilidad de que se pueda administrar una dosis incorrecta o incluso una solución incorrecta, lo que podría resultar en una fatalidad”.
El especialista recomendó consultar con los médicos habituales si es que existe un déficit de vitaminas. “Luego se pueden realizar las pruebas correctas y brindar orientación sobre la vitamina y dosis correctas que debe tomar por vía oral”, sentenció.
