En Chile nacen cada año cerca de 2.500 niños con cardiopatías congénitas. En el mes del corazón, la Fundación Corazón Luchador busca crear conciencia sobre la dimensión de esta patología y la relevancia de detectar en forma temprana los síntomas asociados a esta malformación del corazón que se desarrolla durante el proceso de gestación del bebé.

Entre los llamados de alerta para los padres se encuentran la frecuencia cardíaca y respiración acelerada; el sudor excesivo; cansancio y fatiga extrema. A ello, se suma presentar un leve tono azulado en la lengua, especialmente cuando el bebé come o llora; y un crecimiento y desarrollo más lento que lo normal.

Daniela Chávez, encargada de Comunicaciones de la fundación, destacó que “como organización de padres nos interesa informar a la sociedad sobre las cardiopatías congénitas porque el corazón no falla solo por infartos. En Chile, la principal causa de muerte en menores de 2 años son las cardiopatías congénitas, no es el cáncer como muchos creen. Hay que difundir sobre esta patología para que la cobertura en tratamientos sea cada vez más completa y amplia para contribuir a mejorar la sobrevida de quienes padecen esta enfermedad y su calidad de vida”.

La vocera explicó que en la agrupación “seguimos trabajando para que podamos contar con coberturas para enfrentar el invierno de mejor manera. Es así por ejemplo como hemos pedido que se nos incluya en la Ley Ricarte Soto para proteger a nuestros hijos del virus sincicial ya que el bajo peso de los bebés disminuye su sistema inmunológico. También necesitamos que se amplíe a nivel general la cobertura GES para las cardiopatías congénitas operables y no sólo en menores de 15 años como ocurre hoy”.

Los síntomas de las cardiopatías congénitas se pueden manifestar apenas nace el niño o durante los años siguientes. Estas afecciones, que comprometen el sistema cardiopulmonar de los bebés, los expone a contraer severas infecciones respiratorias como el virus sincicial respiratorio (VRS), virus influenza, neumococo, bordetella pertussis y otros agentes infecciosos que afectan a la población general y que se manifiestan a temprana edad a través de una bronconeumonía o bronquiolitis. Es por eso, que los bebés con problemas del corazón requieren más del doble de hospitalizaciones en caso de una infección respiratoria.

Para el doctor Ricardo Eltit, pediatra cardiólogo del Hospital Carlos Van Buren, las bajas temperaturas favorecen la mayor circulación de virus respiratorios y, entre ellos, la infección por virus sincicial es potencialmente grave en niños pequeños, especialmente en pacientes más vulnerables, como son los prematuros y aquellos con cardiopatías congénitas significativas. “Este grupo en particular presenta una mayor morbilidad y mortalidad (riesgo de complicaciones y muerte) y, por otro lado, una eventual postergación en la corrección quirúrgica de la cardiopatía. Esto hace tan importante las medidas de prevención de la infección por VRS en los niños con cardiopatías significativas no operadas”.

Daniela Chávez comentó que “siempre es necesario tener una mirada positiva porque se puede nacer y vivir con un corazón diferente. Por eso, a través de nuestras redes sociales celebramos este mes honrando a nuestros Corazones Luchadores, contando sus historias e informando a la población que ellos existen, dando día a día una gran lucha”.