Como ya sabemos, en estos momentos es imposible ir a un salón de belleza a sacarnos el esmalte permanente, menos para hacernos una manicure.

Con el paso de los días las uñas de muchas y muchos reflejan esta situación ya que, en comparación a los esmaltes tradicionales, no es tan fácil retirar el gel o el acrílico en casa. Sin embargo, no es imposible.

Existe una forma de retirar el esmalte permanente en gel y también el acrílico sin dañar las uñas en tres sencillos pasos. Solo necesitas: una lima, acetona, algodón, papel aluminio y un empujador de cutículas.

Pexels (CC)
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1. Limar

De acuerdo a Elena Daudova, manicurista del salón de belleza español Daudova Beauty, lo primero que se debe hacer es limar cuidadosamente la capa superior del esmaltado, según consignó la revista ¡Hola!

Esto se realiza para eliminar la capa protectora de la manicure, la que usualmente entrega su característico brillo. Además, ayuda a que se cumpla de mejor forma el siguiente paso.

2. Aplicar acetona

Pon acetona en un algodón y luego envuelve con este las uñas. Daudova aconseja usar también papel aluminio para que no penetre el aire, que puede provocar que el esmalte se vuelva a endurecer.

En el caso del esmalte en gel, lo ideal es dejarlas entre 15 y 20 minutos. En tanto, para las acrílicas, media hora o un poco más.

3. Retirar el esmalte

Cuando veamos que el esmalte está blando —en ocasiones se desprende solo— con ayuda de un empujador de cutículas lo retiramos, teniendo especial cuidado con no dañar placa ungueal, que es la superficie de la uña.

De acuerdo al portal Glamour, un buen consejo antes de realizar este paso es aplicar vaselina para proteger los dedos y las uñas. Además, eso también permitirá que se hidraten tras pasar tanto tiempo en acetona.

Finalmente, cuando ya tengas tus uñas libres de esmalte, te recomendamos aplicar un endurecedor natural para ayudar a fortalecerlas. Puedes hacer uno con ajo y limón.