No caben dudas que el agua es parte fundamental en la dieta de la mayoría de las personas. Esto puesto que el cuerpo humano está compuesto de un 60% de agua, mientras que el cerebro tiene un 70%, la sangre un 80% y los pulmones cerca de un 90%, según científicos el USGS.

Es así como expertos aconsejan beber agua regularmente, en relación al cuerpo de cada individuo. Al respecto, la Clínica Las Condes establece que lo recomendado para un adulto es beber entre 2 y 2,5 litros diarios (basado en un adulto promedio de 70 kilos, 15-20 ml/kg de peso), y en un niño, de 1 a 1,5 litros al día (basado en aportes de 50-60 ml/kg de peso). De lo contrario, el cuerpo puede presentar deshidratación y arrastrar diferentes problemas.

Una investigación realizada por académicos de la Universidad de Connecticut (Estados Unidos) concluyó que cuando se pierde mucho líquido al realizar ejercicio y no se recupera bebiendo agua, se puede ver afectado tanto el estado de ánimo como la concentración y, al mismo tiempo, aumentar el riesgo de sufrir dolores de cabeza. En tanto, ¿qué otros problemas traer beber poca agua?

1. Estar estreñido

Otro síntoma claro de la falta de agua es el estreñimiento, según recogió un artículo de la sección de Salud del diario El País. Al respecto, una persona adulta debería defecar como mínimo tres veces a la semana.

Al respecto, un artículo publicado por el medio científico European Journal of Clinical Nutrition titulado “Deshidratación leve: ¿factor de riesgo de estreñimiento?”, explica que la deshidratación “reduce el agua contenida en las heces y por tanto provocan estreñimiento”.

Otro artículo publicado en el mismo sitio, aplicado a cerca de 4000 mil mujeres japonesas con problemas de estreñimiento, concluyó que beber agua podría ayudar a sanar este problema, puesto que este líquido potencia la digestión. “La baja ingesta de agua se asoció con una mayor prevalencia de estreñimiento”, detalló.

2. Mucho cansancio

Si te sientes muy agotado, uno de los probables causantes puede que sea la poca ingesta de agua. Al respecto, la doctora Emma Derbyshire, miembro de la ONG británica Natural Hydration Council (NHC), aseguró que el cansancio tiene directa relación con la cantidad de agua que se bebe a diario.

“La evidencia indica que mantenerse hidratado está asociado a un mejor rendimiento cognitivo y mental, y que ayuda a combatir el cansancio y la fatiga, todos los cuales pueden ayudar a aumentar la productividad”, dice la experta, que destaca la importancia de beber agua en el trabajo.

Los trabajadores “deben tomar un descanso para beber agua, y no sólo té y café, y también asegurar que su organización proporcione acceso a un suministro atractivo, no un enfriador de agua en un lugar de aspecto sucio”, añadió.

3. Has sufrido de cálculos renales

Uno de los padecimientos más dolorosos que puede sufrir un humano son los cálculos renales, según el urólogo Felipe Beasain, de la Clínica Ciudad del Mar. “Son verdaderas piedras que se van formando dentro de los riñones. Potencialmente pueden causar diversos problemas médicos al paciente tales como los dolorosos episodios de cólico renal, hematuria o sangrado urinario, pielonefritis o infección del sistema urinario, falla renal aguda y en algunos casos hasta la insuficiencia renal terminal”, dijo.

Sin embargo, una de las formas más efectivas de prevenirlos es beber agua diariamente. Es importante “mantener una adecuada ingesta de líquidos” para evitarlos, explicó. De la misma forma, agregó que “no consumir alimentos con exceso de sal y racionalizar el consumo de proteínas” también son otras formas de prevenir.

4. Problemas para respirar

Es una de las señales menos populares, pero también una de las más importantes. Según una investigación del pediatra aleman H. Kalhoff, de Hospital de Dortmund, recogida por el medio español, “el sistema bronco-pulmonar facilita el transporte del oxígeno y el intercambio entre los sistemas acuosos interiores del cuerpo y la atmósfera seca del exterior”.

Y añadió: “De ahí la importancia de una suficiente hidratación, aunque todavía queda mucho por investigar para relacionar directamente la deshidratación como factor de riesgo en las enfermedades pulmonares”.

5. Tu piel está muy tensa

Según el medio español, una forma clara para detectar la deshidratación es pellizcar la piel entre las cejas o en el dorso de la mano (entre los dedos pulgar e índice), y verificar con qué rapidez regresa a la normalidad: si queda marcada por muchos minutos, es una señal de que tu cuerpo necesita agua.

Respecto a este punto, Ariana Sánchez, Médico Especialista en Medicina Estética y Antiaging de Vitaclinic, explica que, especialmente en invierno, la piel suele resecarse y se recomiendan beber el máximo de agua según el cuerpo del paciente (más de dos litros, en un adulto promedio).

¿Cómo reconocer una deshidratación?

La enciclopedia médica MedlinePlus señala que los signos de una deshidratación leve a moderada son los siguientes:

– Sed
– Boca seca o pegajosa
– No orinar mucho
– Orina amarilla oscura
– Piel seca y fría
– Dolor de cabeza
– Calambres musculares

En tanto, si ya estamos en un estado grave, los síntomas pueden ser los siguientes:

– No orinar u orina amarilla muy oscura o de color ámbar
– Piel seca y arrugada
– Irritabilidad o confusión
– Mareos o aturdimiento
– Latidos cardíacos rápidos
– Respiración rápida
– Ojos hundidos
– Apatía
– Shock (flujo sanguíneo insuficiente a través del cuerpo)
– Inconsciencia o delirio

Finalmente, es importante señalar que si tienes uno o más de estos síntomas debes acudir a un médico.