Fue en noviembre de 2015 cuando un equipo de investigadores, en conjunto con personal de la Armada Nacional de Colombia y de la Dirección General Marítima (DIMAR), encontraron los restos de una famosa embarcación española hundida en 1708 frente a las costas de Cartagena de Indias.

Se trata del galeón San José, el cual desapareció bajó las aguas del Caribe tras enfrentarse a la flota británica del comodoro inglés Charles Wagner en la Batalla de Barú.

Su hundimiento no solo provocó la muerte de casi 600 personas, sino que además hizo que un millonario tesoro quedara enterrado en las profundidades del mar.

Tal como recoge El País, actualmente se desconoce la carga exacta que transportaba el galeón, ya que si bien en su tiempo se declaró ante la Corona un cargamento de medio millón de pesos de oro de la época, se sabe que la tripulación ocultó una cantidad mucho mayor en diferentes partes del barco.

Explosión del galeón San José, obra de Samuel Scott (CC) Wikimedia Commons
Explosión del galeón San José, obra de Samuel Scott (CC) Wikimedia Commons

A pesar de que no existen datos oficiales, los expertos creen que el San José contiene unas 200 toneladas de oro, plata y joyas.

Para extraer el tesoro, en 2015 el gobierno de Colombia firmó un acuerdo con Maritime Archaeology Consultans (MAC), firma que se quedaría con el 50% de lo encontrado tras invertir unos 60 millones de dólares en el rescate.

Esta compañía sumergió dos robots submarinos con cámaras para tomar muestras y así recabar mayores antecedentes, aportando con 7.807 imágenes de alta resolución.

No obstante, de acuerdo al citado medio, la administración del presidente Iván Duque anunciará públicamente en octubre si es que mantiene el contrato con MAC, o si decide extraer los restos por su cuenta.

Mosaico con miles de imágenes del yacimiento del galeón San José | ICANH
Mosaico con miles de imágenes del yacimiento del galeón San José | ICANH

“Como consecuencia del peso y la velocidad del hundimiento, el casco perforó el fondo [marino], ya que el 96,2% está formado por lodo”, señala el informe oficial, al que tuvo acceso El País.

A pesar que la embarcación se hundió seis metros en la superficie marina, mantiene el 90% de la carga original, equivalente a unos 600 metros cúbicos de riquezas, entre los que se encuentran centenares de piezas de cerámica española, lingotes, barras, discos y oro en polvo, “así como un número incontable de escudos de oro esparcidos, principalmente, por la popa y babor”.