Muchas personas pasan su tiempo probando nuevas dietas, dejando de comer distintos alimentos o simplemente averiguando cómo bajar esos molestos kilos de más. La mayoría de las veces se viene a la cabeza la necesidad de dejar de lado el azúcar y los carbohidratos.
Pero lo anterior podría quedar en el pasado, porque un nuevo estudio revela que el plan de pérdida de peso más eficaz podría no tener nada que ver con disminuir edulcorantes o calorías, sino que todo se trata de abandonar la carne, según el sitio de alimentación The Good Housekeeping.
Según la investigación publicada en el Diario del Colegio Americano de Nutrición revela que las personas que hacen dieta no solo pierden peso de manera más eficcaz al optar por una dieta vegetarianas, sino que también aumentan su metabolismo.
Sobre el estudio
De esa manera, un grupo de 74 personas, todas con diabetes tipo 2, siguieron una dieta de granos, verduras, frutas y frutos secos, y los investigadores descubrieron que la dieta era dos veces más eficaz que una convencional. Además, otro beneficio es que reduce la grasa muscular, lo que deriva en un metabolismo más alto.
El doctor Kahleová, que estudió el tejido graso de los pacientes, afirmó que este hallazgo es importante para las personas que están tratando de perder peso “incluidos los que sufren de síndrome metabólico y/o diabetes tipo 2. Pero también es relevante para cualquiera que tome en serio su manejo del peso y quiera mantenerse saludable”, explicó el profesional.
Si no estás seguro de poder dejar la carne completamente, pudes recurrir a otros alimentos para sustituirla. La Directora de Nutrición del Good Housekeeping Institute, Jaclyn London, indica que hay maneras fáciles de reemplazar al menos una comida con carne por día.
“Definitivamente recomendaría cambiar la carne por porotos, garbanzos, lentejas, nueces y semillas tan a menudo como sea posible, y elegir carnes magras, mariscos, huevos y productos lácteos como parte de la alimentación diarias”, afirmo. Asimismo, conluyó que es importante aumentar las fuentes vegetales de proteínas de coliflor, brócoli, hojas verdes, champiñones, e incluso la palta.
