En Chile, la Encuesta Nacional de Salud estima que 6 de cada 10 chilenos cree sufrir un trastorno de sueño. A su vez, un estudio publicado en el ‘Journal of Clinical Sleep Medicine’, realizado en capitales latinoamericanas, posicionó a los santiaguinos como los más roncadores (66,4%) y con mayor cantidad de apneas del sueño (11%), siendo estas más frecuentes en hombres.

“Dormir bien es fundamental para tener un buen desempeño diario. Por eso cuando una persona lleva un determinado tiempo durmiendo mal o muy cansado durante el día a pesar de haber dormido las 7 o 8 horas que corresponden a un adulto, sospechamos la existencia de un trastorno del sueño. La única forma eficaz de diagnosticarlo es monitoreando a la persona mientras duerme a través de una polisomnografía”, explica el neurólogo y director médico de Clínica Somno, Pablo Guzmán.

Pablo Guzmán en consulta - Clínica Somno
Pablo Guzmán en consulta – Clínica Somno

El examen consiste en una medición del flujo respiratorio, esfuerzo para respirar, niveles de oxigenación de la sangre, temperatura y presión arterial, funcionamiento del corazón y el cerebro. Todo mientras el paciente duerme.

“En Chile existe un sub-diagnóstico importante de los trastornos del sueño. Las personas creen que dormir mal es algo normal y aprenden a lidiar con las malas noches o el cansancio de día. Lo riesgoso de esto es que hay trastornos que pueden afectar a las personas, causando graves enfermedades o incluso la muerte. Ese es el caso de la apnea del sueño” agregó Guzmán.

Históricamente, la polisomnografía debía realizarse pasando una noche en un hospital o centro médico, lo que era incómodo para el paciente. Sin embargo, hoy ya existe en Chile la tecnología para hacer estos exámenes con equipos portátiles y en la comodidad del hogar. “La tecnología hoy nos permite poder monitorear el sueño del paciente en su propia cama. Eso mejora la experiencia de la persona y los predispone a un mejor diagnóstico”, agregó el especialista.

Problemas de apnea - Clínica Somno
Problemas de apnea – Clínica Somno

El procedimiento durante el examen no es invasivo, no requiere el uso de fármacos ni pinchazos. La preparación incluye reducir al mínimo el consumo de bebidas y alimentos estimulantes como: chocolate u otros altos en azúcar. Tampoco es necesario la compañía de un familiar en el hogar.

En el caso de optar por la polisomnografía a domicilio, durante la tarde previa al examen, una kinesióloga de Clínica Somno visita el hogar e instala el equipo, lo que toma alrededor de 30 minutos. Al mismo tiempo, se le entregan las indicaciones al paciente y al día siguiente la misma profesional vuelve a la casa para retirar el equipo durante la mañana.

Posteriormente, en un plazo de 1 semana, un médico especialista entrega el informe médico al paciente. Aquí se explica cómo está su calidad del sueño y el tratamiento a seguir según el tipo de trastorno diagnosticado. “Cuando los pacientes sienten los cambios de dormir bien, les cambia la vida. Básicamente, porque no están cansados de día”, concluyó Pablo Guzmán.

Para más información sobre este tema, puedes ingresar al sitio web de Clínica Somno y revisar los distintos servicios que ofrece.