NBC

EEUU concreta deportación de niña norteamericana que estaba en tratamiento contra un cáncer cerebral

14 marzo 2025 | 12:13

La cadena NBC informó sobre un caso que afecta a una familia norteamericana originaria de México, quienes fueron deportados de Estados Unidos (EEUU) mientras una de sus integrantes, niña de 10 años, estaba en pleno tratamiento contra un cáncer ceberal.

Se trata de Juan y María, ambos mexicanos que no contaban con situación regular en el mencionado país, junto a sus cinco hijos, quienes habían nacido en dicho territorio.

El clan realizaba viajes constantes entre Rio Grande (México) y Houston, donde la niña había sido operada de la enfermedad hace algunos meses.

Fue en febrero pasado cuando intentaron ingresar a Estados Unidos con documentación médica, pero la policía fronteriza procedió a detenerlos y dejarlos en arresto. Posteriormente, fueron devueltos a México.

En breves declaraciones, la madre de la menor aseguró que el presente es muy complejo, ya que la pequeña aún se encontraba en rehabilitación y “bastante débil”. El proceso lo habían hecho en un centro de Texas, al cual habían accedido mediante una fundación.

Niña con cáncer cerebral deportada de EEUU

Niña norteamericana con cáncer es deportada de EEUU

De hecho, aclara, la niña presenta inflamación cerebral, dificultades para hablar y problemas de movilidad.

“El miedo es horrible. Casi no puedo explicarlo, pero es algo frustrante, muy duro”, indicó.

Por ahora el caso está siendo revisado por el Proyecto de Derechos Civiles de Texas, que busca que al menos uno de los padres logre una visa humanitaria para que la menor pueda volver a Houston.

El grupo, por ahora, espera respuestas en una vivienda social en el norte de México, pero reconocen que todo es muy incierto.

Juan y María habían llegado a Estados Unidos en 2013, en busca de oportunidades laborales. Habían formado su familia en ese país, pese a permanecer indocumentados.

En esta ocasión sólo su hijo mayor, de 17 años, no fue deportado por las autoridades, aunque permanece bajo el cuidado de un ente público en Texas.