Medios en Inglaterra dieron cuenta de una insólita situación ocurrida en un barrio de la ciudad de Leicester, donde un albañil destruyó una casa que estaba recién remodelada, debido a que el dueño no había cumplido con uno de los pagos. Debido a esto, el antejardín quedó lleno de escombros.
De acuerdo al medio The Sun, a fines de 2020 un hombre llamado Jay Kurji compró una casa en aquella ciudad por un valor de 475.000 libras esterlinas (480 millones de pesos chilenos), en un barrio llamado Stoneygate.
A comienzos de este año Kurji contrató los servicios de un albañil para construir dos habitaciones más, con el objetivo de que allí pudiera vivir con su esposa y los cuatro hijos.
“Compré la casa el año pasado y contraté al constructor para que empezara a trabajar en febrero. Queríamos muchas obras para que pudiera ser una casa familiar para nosotros seis”, indicó.
El trabajo estuvo terminado en mayo pasado, pero justo en ese momento comenzaron los problemas entre el dueño de casa y el trabajador, debido a unos cobros extras que surgieron en la obra.
Más en específico, en ese momento el albañil presentó un cobro adicional por 3.500 libras más (3.6 millones de pesos chilenos), pero Jay Kurji se negó a realizar esto, debido a que el contrato por la obra ya estaba firmado y no estipulaba más gastos.
Semanas después la familia salió de vacaciones y esto fue aprovechado por el trabajador, quien un día acudió con maquinaria pesada hasta el lugar y destruyó la obra.
Producto de eso, el inmueble quedó sin techo y varias de sus paredes, por lo que evidentemente estaba inhabitable. Además, todos los escombros quedaron en la zona anterior.
Al notar todo lo ocurrido, Kurji decidió denunciar al hombre ante la policía de Leichestershire, pero las autoridades indicaron que no podían intervenir debido a que se trataba de una disputa civil.
“Me había ido de vacaciones y estaba a 200 millas cuando todo sucedió. Me comuniqué con la policía, que dijo que era una disputa y no un caso criminal”, expuso al citado medio.
“Todo esto es una pesadilla, por desgracia elegí al peor contratista de toda Gran Bretaña”, añadió.
Por ahora, el trabajador fue denunciado ante los tribunales de la ciudad de Leicester, mientras que la familia debió arrendar un departamento para alojar durante este periodo.
