El teletrabajo, las clases online de los hijos, la comida, el aseo, las compras, la vida…
No hay día en el que las familias no atraviesen, tras la aparición del coronavirus, un ir y venir de situaciones cotidianas que se ven ligeramente menos complejas con el fin del año escolar.
En Reino Unido, la aparición de una nueva cepa de la covid, además de la segunda ola de la enfermedad, complicó el diario vivir de las familias promedio. Para los Radford, en tanto, el panorama es caóticamente distinto.
Viven en Morecambe, en el condado inglés de Lancashire y, de nuevo, han despertado el interés de medios británicos, como Daily Mail.
Sue y Noel Radford, de 45 y 50 años, respectivamente, se conocieron siendo unos niños. Cuado ella tenía 14 años tuvieron a su primer hijo, Chris, ahora de 31 años. 4 años después nació Sophie. Los dos primeros del largo linaje ya no viven con sus padres. La veintena restante, es parte de esta historia de confinamiento numeroso.
Al menos una decena de los niños están en edad escolar. Las clases online, como en el resto de familias, forman parte de la nueva normalidad. Sin embargo, se trata de coordinar las clases de todos estos. Tareas, reuniones con los maestros, pruebas, etc.
La matriarca de la familia ha reconocido que ha sido difícil desde un inicio. Los hijos mayores han tenido problemas con sus clases virtuales, al punto de perder algunas sesiones de trabajo, no obstante, todos han ido aprendiendo en la marcha y turnándose para poder cumplir con las responsabilidades escolares.
“Creo que ustedes realmente necesitan desearme suerte, porque no soy maestra. Siento que esto simplemente no va a ir bien”.
Más adelante, la mujer dejó ver su optimismo en el futuro inmediato: “Pero siento que somos como todos los demás, solo vamos a tener que aprovecharlo al máximo, hacer nuestro mejor esfuerzo y eso es todo lo que podemos hacer”.
El aseo y el orden se vuelve, además, otra de las situaciones que deben sortear. La casa tiene 10 habitaciones entre las que tienen que dividirse 22 personas. A esas alturas, que los dos hijos mayores se hayan independizado, resulta en un poco más de espacio para el resto.
Pero, al leer una ínfima parte de las vicisitudes de una familia numerosa en confinamiento, surge otro detalle: la última hija de esta familia, nació en abril pasado, cuando la pandemia ya estaba más que asentada a nivel mundial, como el nombre de la bebé, Heidie Radford.
No son una familia convencional. Tienen su propio canal de Youtube y, anteriormente, su programa de televisión en Channel 4, denominado “21 Kids and Counting” (anteriormente llamado 15 Kids and Counting). Parece que el conteo iba en serio y lo demostraron con la llegada de Heidie.
Su cuenta de Instagram, con más de 300 mil seguidores, es reflejo de su interés por mantenerse en la memoria de un público que reacciona de maneras distintas a su filosofía de vida: algunos, reprochan su nulo control de natalidad. Otros los consideran una familia adorable.
Los gastos de una familia numerosa
Cuando la mayoría de familias, a nivel mundial, tienen que hacer cuentas claras y precisas de sus gastos, los Radford deben quintuplicar esfuerzos.
Además de ponerle un poco de reality show a sus jornadas, también le agregan levadura y ponen manos a la obra en su panadería Faraday’s, creada en 1999, la cual se ha ido expandiendo gracias a la atención en número que han llamado a nivel internacional.
Sue, quien dicho sea de paso, ya es abuela de 6 niños, tiene los costos identificados a la hora de cubrir las necesidades básicas de su numerosa familia.
Se auxilian de las ganancias de su negocio familiar y complementan con los 217 dólares semanales que reciben de asistencia gubernamental. En pesos chilenos, cada 7 días reciben 157 mil 368. Mensualmente, eso se traduce en más de 600 mil pesos chilenos desde el gobierno británico.
Con algunas cifras puestas sobre la mesa, los Radford tienen que destinar una parte para la comida de todos.
Para la alimentación en casa, gastan 320 dólares, o 232 mil pesos chilenos. Si quieren comer afuera (cosa que se vuelve imposible en confinamiento), deben invertir casi 140 mil pesos chilenos (192 dólares).
La lavandería es otro agotador y enorme gasto. Diariamente deben lavar 18 kilogramos de ropa, según su experiencia contada a portales británicos, retomada por Infobae.
¿Salir al cine? Necesario, pero un atentado al bolsillo.
“Nos gusta ir al cine, especialmente en las vacaciones, cuando los niños están un poco aburridos, está lloviendo y no hay mucho más que puedan hacer. ¡Pero puede costar hasta 10 euros (USD 12,83 o casi 10 mil pesos chilenos) por persona, por lo que puede resultar realmente costoso!”.
No obstante, no puede decirse que esta familia vive limitada, debido a lo numerosa que es.
Hablan de haber pasado vacaciones en Holanda o EEUU: “Fuimos a Florida en febrero y vamos a Holanda esta semana (revelaron hace unos meses), pero es una operación militar. El proceso de empacar es un trabajo duro, pero si pongo la ropa de cada niño en una bolsa de basura y etiqueto de quién es, lo hace mucho más fácil cuando lleguemos allí. “Normalmente llevamos unas siete maletas con nosotros”, aseguró Sue.
La vida en pareja de los Radford ha pasado a planos bastante complicados, ya que cuando habían clases presenciales, también existía mayor probabilidad de hacer alguna actividad como pareja, fuera de procrear más vidas.
Su situación, no obstante, según la experiencia de la madre de los 22 hijos, no imposible de llevar. En su vocabulario, sin embargo, siempre está primero la palabra “familia”.
“Tratamos de hacer cosas todos juntos como una familia. Cuando los niños están fuera de la escuela, creo que es bueno pasar tiempo juntos. Es posible que algunos de los niños mayores no quieran venir o que estén en el trabajo porque todos tienen turnos diferentes. Pero aún así terminamos con muchos niños para llevar”.
Padres: Sue Radford, de 45 años, y su marido Noel, de 50.
22 hijos, entre estos, Chris, de 31; Sophie, de 27: Chloe, de 25; Jack, de 23; Daniel, de 21;
Luke, de 20; Millie, de 19; Katie, de 18; James, de 17; Ellie, de 15; Aimee, de 14; Josh, de 13; Max, de 12; Tillie, de 10; Oscar, de 9; Casper, de 8; Hallie, de 5; Phoebe, de 4; Archie, de 3; Bonnie, de 2; y Heidie, de nueve meses.
