Un complicado caso ha entristecido a la sociedad mexicana en los últimos días. Éste afecta a una familia de la ciudad de Palenque (México), quienes el fin de semana pasado se disponían a recoger el cadáver de su bebé fallecido, pero se encontraron una dramática sorpresa: el ataúd estaba relleno con sábanas y bolsas de plástico.
Según detalla la agencia de noticias RT, el pequeño había nacido el pasado 9 de agosto en una ciudad llamada Ocosingo (Chiapas), pero por complicaciones en su pulmón e hígado fue trasladado hasta un centro sanitario en la localidad de Palenque.
Al día siguiente, debido a nuevos problemas de salud, el bebé fue llevado hasta el Hospital General de la ciudad antes mencionada. Allí falleció la noche del sábado 10 de agosto. Sus padres fueron avisados minutos más tarde.
Manuel Hernández, padre del menor, fue notificado por el centro para que fuera a llenar las actas de defunción y retirara el cuerpo desde el lugar. El hombre cumplió con todos los trámites y desde el recinto le entregaron un pequeño ataúd blanco, donde se suponía que estaba el cadáver.
No obstante, indica Hernández, al llegar a casa y abrir el féretro se dieron cuenta que éste estaba lleno de bolsas plásticas y sábanas en su interior, pero sin el cuerpo de su hijo.
Asustados por esta situación, la familia acudió nuevamente hasta el Hospital General. Allí se produjo una discusión entre funcionarios y los padres del menor. Finalmente debieron intervenir los directivos para zanjar el asunto.
Luis Argeo Camacho Damas, vigilante del centro médico de Palenque, aseguró al citado medio que su unidad es la encargada de entregar los cuerpos de las personas fallecidas. En ese momento agregó que hasta la sala sólo llegó el ataúd con el acta.
Argeo complementó su declaración indicando que la orden que le habían dado era que entregara el supuesto cuerpo dentro del ataúd y el acta de defunción
“Yo le entregué una caja, supuestamente con cuerpo. Yo le pregunté al señor si estaba el cuerpo adentro y sólo lo tomó”, expresó.
“El familiar o la funeraria son los responsables de colocar los cuerpos. Siempre hemos tenido la costumbre de si el cuerpo llega con los peritos, ellos se lo llevan; si son los familiares, ellos lo recogen; si es el cuerpo de la funeraria, ellos lo meten”, agregó.
Finalmente, y tras varios líos administrativos, el hospital entregó el cuerpo correcto del bebé a sus familiares. Hasta el día de hoy no ha existido un pronunciamiento del ente por este mal entendido.
Sin embargo, la Secretaría de Salud estatal abrió una carpeta de investigación para determinar qué funcionario falló en los protocolos de entrega. Desde la oficina pública anunciaron sumarios a futuro.
