Lo que hace tan sólo algunos años parecía un plan imposible, cada día que pasa se convierte en una realidad; las diversas campañas de concientización respecto a las condiciones en que viven los animales empiezan a causar su efecto. Pues, ejemplo de ello es que en Europa y Estados Unidos ya son una realidad los huevos de gallinas felices algo que en Chile no se conocía, pero que poco a poco se va volviendo más popular.

El consumidor de hoy en día es más exigente, tras muchos años de industrialización y de ingerir productos sin investigar cómo se producen, ha llegado el momento de preocuparse por lo que nos llevamos a la boca.

Como muchos ya saben, los huevos felices “son aquellos provenientes de gallinas que crecen en un ambiente mucho más agradable, de libre movimiento sin el estrés de encontrarse encerradas”, tal como señala la especialista en nutrición Jessica Liberona de la Universidad de Los Andes, una diferencia en la etapa de producción que algunos consumidores aprecian en pro al bienestar animal, iniciativas incluso establecidas en su totalidad en países como Francia.

Si bien Chile se encuentra muy lejos de lo que ya se aplica en el viejo continente y en Norteamérica, según el informe de la Asociación Chilehuevos, la producción de huevos de gallinas libres se duplicó en un año, abriendo 2018 con un 2% de producción total.

Según indica el diario El Mostrador, marcas multinacionales como Subway, Doggi’s, Nestle, Sodexo, Hellmans, McDonald’s han establecido su compromiso mundial de utilizar solamente este tipo de huevos.

Existen empresas que llevan años trabajando bajo estos estándares y que se están viendo beneficiadas ante las nuevas exigencias del consumidor. Una de ellas es Ecoterra, ubicada en Buin, la principal referencia en el país cuando se habla de gallinas felices, ya que son los únicos con reconocimiento internacional, al contar con el certificado de bienestar animal “Certified Humane” basado en estándares de calidad que incluyen dietas nutritivas para las gallinas, sin antibióticos ni hormonas, refugios, zonas de reposo, además del espacio adecuado para el desarrollo de sus comportamientos naturales.

Ecoterra
Ecoterra

Los productos de Ecoterra pueden encontrarse en uno de los principales supermercados del país, Jumbo, además, la empresa cuenta con un sistema de reparto clasificado por días, recorriendo todo Santiago y casi todo el país.

También existen empresas como Gallina Feliz, comandada por Renato Maino, bien posicionada en el sector retail una de las más conocidas en el país, sus productos también puede ser localizado en ciertos supermercados.

En Santiago las pymes también buscan hacerse espacio, otra empresa que ofrece este tipo de huevos es La Feria Delivery una compañía súper moderna, como su nombre lo indica, enfocada en el despacho a domicilio de productos que usualmente encontramos en una feria.

Si bien no encontrarás sus huevos en un supermercado, es también una buena opción para comprar. Tienen una plataforma digital que facilita mucho el proceso de compra y un gran trabajo en sus redes sociales, donde ofrecen todo tipo de productos pero, sin duda, la venta de huevos de gallinas felices ha sido un total acierto para ellos: “las ventas de huevos de gallinas libres han aumentado en un 60%, ya es muy raro que me encarguen bandejas de los otros”, destacó la fundadora de la compañía, Paula Ovalle, al diario El Mercurio.

No todas las gallinas son realmente felices

Ciertamente existen muchas más franquicias enfocadas en la venta de este tipo de productos en la capital y en el resto del país, pero no todo lo que brilla es oro, es difícil comprobar la procedencia de los huevos, que realmente sean de gallinas libres, por lo tanto aquellas empresas que cuentan con la certificación como Ecoterra, o con el reconocimiento de sus consumidores como la Gallina Feliz y La Feria Delivery, son algunas de las opciones más confiables en el mercado (al menos por ahora) para el consumo de huevos felices.

En el mercado central o en las ferias se pueden encontrar este tipo de productos, pero no se puede garantizar que la procedencia sea realmente de gallinas libres en cada abasto informal que se promocione.

Caso contrario ocurre en otras regiones del país, dónde sí se puede confirmar su procedencia en las pequeñas granjas, poblaciones a las afueras de Santiago, pero que su comercialización aún no es la mejor. También están esas empresas que se suman a la iniciativa, como Huevos La Castellana de la octava región, con más de 50 años de trayectoria, ahora comercializa también huevos de gallinas libres con uno de los sistemas más modernos de Latinoamérica, según un estudio realizado por la Universidad de Concepción.

Más costosos: ¿hasta dónde llega la conciencia animal?

Si bien la mayoría de las personas que prefiere este tipo de huevos se basa más en una mejoría en cuanto al sabor y a la tranquilidad que brinda su procedencia, es inevitable mencionar lo difícil que resulta creer que los huevos felices reemplacen en algunos años a los tradicionales, ya que la diferencia de costos es notoria, según el estudio de mercado realizado por el diario El Mercurio, mientras una bandeja normal de 12 huevos vale 1900 pesos, una de huevos de gallinas felices ronda los 3500 pesos.

Un mercado que crece ante la variedad

Según estadísticas de la Asociación de Productores de Huevos (ChileHuevos) las ventas de pollitas de un día siguen en aumento con un crecimiento del 11,2% en lo que va de año respecto al mismo período del año anterior, un mercado que no sustituye productos sino que se expande gracias a las nuevas opciones.