Una joven de 23 años, Corinne Hayes, oriunda de Gran Mánchester, Inglaterra, tenía tanto miedo de que su novio, Brian Marshall, de 33 años, se suicidara, que se quitó la vida accidentalmente luego de intentar llamar su atención.

De acuerdo a la investigación del caso, la mujer se ahorcó pero pensando en que su pareja la encontraría a tiempo, ya que cuando él le manifestó sus intenciones de suicidarse, ella le respondió: “Si vas a hacerlo, entonces yo también. Nos vemos en el otro lado“. Sin embargo, el sujeto no vio el mensaje a tiempo y regresó a casa cuando ella estaba muerta.

Cabe señalar que la noche de su fallecimiento, Brian había celebrado una fiesta en su departamento a la que no invitó a Corinne, no obstante, ella igualmente se presentó en su casa pasada la medianoche. Esto provocó una discusión que, según un amigo de Brian, James Brooks, incluyó violencia física, consignó el medio inglés Metro.

Luego de eso, Brian terminó la fiesta y abandonó el apartamento. Fue en ese momento que Corinne le escribió que si hacía algo contra su vida, ella no podría tolerarlo. Por lo mismo, quiso revertir alguna decisión apresurada que tomara él, simulando un suicidio, pero la situación se le escapó de las manos y tuvo un trágico final.

Su madre, Mandy Hayes, señaló que Corinne era una joven “amable, sociable y tenía un corazón de oro”, por lo que jamás habría pensado en quitarse la vida. Sin embargo, cuando se unió a Brian en 2016, rápidamente pudo notar que el joven tenía problemas de salud mental, algo que no la ayudaba pues ella había sido diagnosticada con ansiedad.

Mandy dijo que si bien estaba preocupada por la relación de su hija, ésta veía cómo lo amaba y por eso decidió apoyarla. De hecho, al día siguiente de su muerte, ella pensaba ir a un festival de música con amigas y reiteró que jamás había intentado lastimarse o algo similar.

Cabe señalar que la noche del hallazgo, Brian fue arrestado bajo la Ley de Salud Mental de Inglaterra, debido a sus intenciones de quitarse la vida al ver a su novia fallecida.