Hasta hace unas semanas existía un canal con millones de seguidores en el que se podía ver a dos hermanas en edad escolar llorar, hacer pataletas, orinarse encima y actuar como si fueran bebés.

Se trataba de “Toy Freaks” uno de los canales más populares de YouTube (y también de YouTube Kids) que causaba una gran polémica porque se habría dedicado al fetichismo del abuso infantil.

Greg Chism, padre soltero de dos niñas, Victoria y Annabelle, mostraba videos de sus hijas gritando de miedo y bañándose juntas, imágenes que sus más de 8 millones de usuarios parecían disfrutar a diario.

El hombre se hacía millonario a costa del exhibir a sus hijas en conductas impropias, aunque usuarios de internet reclamaban a YouTube para lograr que eliminaran el canal. Aún así, Chism juraba que su intención era “crear contenido familiar para otros niños”.

Una usuario de Twitter describió el hecho de que existiera este canal de la siguiente manera:

“Descubrir que uno de los canales más populares de YouTube (y especialmente en YouTube Kids) es un canal de fetichismo del abuso infantil me ha hecho sentir completamente enferma todo el día. Espero que las niñas de Toy Freaks puedan ser rescatadas de su padre pronto”.

Uno de los videos más polémicos es el de las dos niñas que están jugando en la bañera y su padre les tira al agua una rana y una langosta, respectivamente, mientras ellas lloran y gritan de miedo.

“El 16 de noviembre, YouTube actualizó su Kids App y sus normas de la comunidad para permitir una regulación más eficiente y que para los padres sea más fácil denunciar”, explicó Chism.

Y agregó que “más tarde ese día, tres o cuatro de nuestros vídeos que no sabíamos que estaban en la aplicación para niños fueron denunciados por la comunidad haciendo que el canal Toy Freaks fuese clausurado”.

Luego de que éste fuera cerrado, el hombre intentó abrir nuevos canales, pero finalmente pensó que lo recomendable era cerrarlos todos, ya que actualmente está siendo investigado, consignó el sitio BuzzFeed News.

Mientras que un representante de YouTube afirmó que “tomamos la seguridad de los niños muy en serio y tenemos políticas claras contra el peligro infantil”.

En definitiva, el responsable de las publicaciones cerró el tema, indicando que “Victoria, Annabelle y yo queremos dar las gracias a los que nos apoyan, ya que esto a dado a mis niñas la oportunidad de desarrollar su creatividad y confianza durante el último par de años”.

“Su futuro es brillante. Mientras que es perturbador para mí que nadie haya encontrado un placer inapropiado en nuestros vídeos, agradezco profundamente la preocupación de YouTube por nuestra familia y no podría ser más feliz de haber tenido esta remarcable experiencia”, concluyó Chism.

“¿Por qué está permitido que exista Toy Freaks? Es abuso infantil. La gente lleva quejándose de ello años, aun así YouTube no hace nada”, dice esta publicación.

Aquí algunas imágenes extraídas de los videos que fueron eliminados y muestran algunos de los momentos en que las niñas eran expuestas en condiciones indignas:

BuzzFeed
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