Un médico del Hospital Scripps Mercy de San Diego, California (EEUU), tuvo una especial idea para tranquilizar a los pacientes de coronavirus que reciben terapia intensiva: puso una foto de su rostro sonriente en su traje de aislamiento, para generar confianza.

El profesional es Robertino García, de 38 años, quien decidió realizar este gesto porque se sentía angustiado por sus pacientes, a quienes deseaba darles una señal de aliento.

Él mismo publicó la imagen en redes sociales, donde reflexionó respecto a la situación que vive dentro del hospital, apoyando en terapia respiratoria.

“Ayer me sentí mal por mis pacientes en urgencias cuando entraba en la habitación con la cara cubierta de trajes. Una sonrisa tranquilizadora hace una gran diferencia en la placa laminada gigante de mi equipamiento, y logro que mis pacientes puedan ver una sonrisa reconfortante”, indicó en redes sociales.

Robertino incluso pidió a los demás profesionales de la salud a repetir el gesto en el hospital, como enfermeras y técnicos, para dar una señal más positiva a quienes están hospitalizados.

Asimismo, el médico y el resto del personal han utilizado las redes sociales para instar a la población a tomar todas las medidas necesarias de prevención de la enfermedad, que tiene a Estados Unidos sumido en una crisis sanitaria y social.

“Quédate en casa, solo sal por razones esenciales, lávate las manos, no toques tu cara, tose en el codo, mantente a seis pies de distancia social y salvarás la vida de esta manera. Tú y tu familia no quieren terminar en el hospital conmigo cuidando de ti”, indicó García.

Por otro lado, hace dos días Robertino compartió otra imagen en Instagram, en la cual indicaba que un grupo de médicos de Nueva York, la ciudad más afectada en Estados Unidos por la pandemia, habían replicado su iniciativa en sus respectivos centros.

“Me ​​enviaron esta foto otros especialista, vieron mi foto en línea y también querían compartir sus sonrisas con sus pacientes. Increíbles héroes de la salud. Elegimos esta profesión debido a nuestros corazones llenos de compasión”, indicó.

Hay que señalar que Estados Unidos está viviendo complejos días a causa de esta pandemia, debido a que más de 438.000 personas se han contagiado de la enfermedad.

De este número, 15.700 han muerto y otros 24.400 se recuperaron. Según cifras, quienes más se han visto afectados son personas obesas, en situación de pobreza y ancianos.

A eso se suma que el desempleo se disparó en las últimas semanas, llegando a 6.6 millones de nuevas personas sin trabajo, a causa del brote de coronavirus.