Chile vivió una jornada bastante complicada el pasado día lunes, cuando se registraron una serie de incidentes en ciudades como Concepción, Santiago y Antofagasta, entre otras, en el marco de la situación de crisis que vive el país

Esta situación dista mucho de lo que ocurrió el viernes pasado 1.2 millones de personas marchó de forma totalmente pacífica por la capital de Chile, situación que fue admirada incluso desde el extranjero.

En la historia existe un precendente de marcha pacífica que logró una de las reformas más importantes en Estados Unidos. Hasta el día de hoy es denominada como la Marcha sobre Washington, desarrollada un 28 de agosto de 1963 en la capital de aquel país.

Aquella década fue bastante convulsionada para Estados Unidos, país donde la esclavitud se había abolido hace más de 100 años, pero que aún así mantenía severas diferencias entre la población blanca y negra.

Marcha sobre Washington | Wikimedia Commons
Marcha sobre Washington | Wikimedia Commons

Aquello llevó a que 1963 fuera un año especialmente violento en diversos estados, donde por un lado la población afroamericana exigía un trato igualitario y los blancos estaban decididos a mantener sus privilegios.

Según detalla el Washington Post, el líder de aquella revolución fue Martin Luther King, un activista y dirigente religioso negro que veló porque las reivindicaciones se realizaran de una forma pacífica. Sin ir más lejos, estos intentos le valieron obtener el Nobel de la Paz en 1964.

La marcha sobre Washington

Por esos años a la población negra se le negaban varios derechos civiles que eran comunes entre blancos. No podían votar en todos los estados, ni entrar a restaurantes de lujo, tampoco podían acceder a ciertos empleos (en su mayoría de mayor categoría).

Junto con eso, los hijos de afroamericanos no podían acudir a las escuelas de los blancos y acceder a universidades privadas. A todo eso se sumaba que muchos de ellos seguían siendo perseguidos por el Ku Klux Klan (grupo supremasista blanco).

Con todo este contexto, la Marcha sobre Washington fue una protesta pacífica que congregó a 250.000 personas en la capital de Estados Unidos. Todos ellos recorrieron el camino entre el National Mall hasta el Monumento a Lincoln, sin generar hechos de violencia.

Según detalla The New York Times, un 80% de los manifestantes eran de raza negra y otro 20% eran blancos. La consigna del movimiento fue “Empleo, Justicia y Paz”.

Marcha sobre Washington | Wikimedia Commons
Marcha sobre Washington | Wikimedia Commons

La marcha fue coordinada por organizaciones sindicales, religiosas y defensoras de derechos civiles; las cuales estuvieron pendientes de cuidar el carácter pacífico de la aglomeración y evitar enfrentamientos con las fuerzas de orden.

Uno de los oradores de esa tarde fue Martin Luther King, quien pronunció el histórico discurso “I have a dream” (Tengo un sueño), llamando a su comunidad a una revolución de carácter pacífica y disciplinada.

“Este es el momento de subir desde el oscuro y desolado valle de la segregación al soleado sendero de la justicia racial”, dijo en una de las partes más aplaudidas.

“Cuando permitamos que la libertad suene, cuando la dejemos sonar desde cada pueblo y cada aldea, desde cada estado y cada ciudad, podremos acelerar la llegada de que el día en el que todos los hijos de Dios, hombre blancos y hombres negros, judíos y gentiles, protestantes y católicos, serán capaces de juntar las manos y cantar con las palabras del viejo espiritual negro”, agregó en ese entonces.

En ese momento también hizo alusión a la violencia de manifestaciones anteriores: “No busquemos saciar nuestra sed de libertad bebiendo de la copa de la amargura y del odio. Debemos conducir siempre nuestra lucha en el elevado nivel de la dignidad y la disciplina”.

Otros oradores fueron el dirigente sindical Walter Reuther, la joven estudiante Joséphine Baker y el dirigente Floyd McKissick, quien leyó un discurso del líder James Farmer, quien en ese momento estaba encarcelado en Luisiana.

Marcha sobre Washington | Wikimedia Commons
Marcha sobre Washington | Wikimedia Commons

Manifestaciones de este tipo llevaron a que se aprobara la Ley de Derechos Civiles en 1964 y la Ley de Derechos al Voto en 1965, fundamentales en la construcción de una nueva sociedad norteamericana.

El carácter pacífico de esta manifestación, pionera en su tiempo, y el discurso que pronunció ese día llevó a Luther King a quedarse con el Premio Nobel de la Paz en 1964.

Desafortunadamente, el dirigente fue abatido de un tiro en la cabeza por un francotirador, mientras saluda a sus seguidores desde el balcón del Hotel Lorraine en Memphis, Tennessee.