Un complejo caso médico ha conmocionado Holanda desde febrero pasado, se trata de una demanda interpuesta por decenas de personas contra un médico experto en fertilidad. En la acción se le acusa de haber usado su propia esperma para fecundar óvulos de sus clientes.

Según detalla el medio CNN, en ese entonces un tribunal holandés aceptó investigar una demanda interpuesta por 22 personas que serían hijos biológicos de Jan Karbaat, quien falleció en 2017 a los 89 años.

En este sentido, la corte instó a la familia del médico a permitir que peritos examinaran el ADN del médico, debido a que consideraban que existía suficiente evidencia de posible engaño a pacientes.

Un antecedente relevante salió a la luz meses atrás, debido a que se descubrió que el ADN del hijo de Karbaat tiene una “relación biológica relevante con 47 personas que el médico ayudó a concebir”.

Esto apoyaría una tesis que se ha sostenido en los últimos años en el mencionado país europeo, la cual sostiene que el médico habría engendrado cerca de 200 personas al cambiar las muestras de esperma.

Jan Karbaat | CNN
Jan Karbaat | CNN

Junto con eso, el tribunal colegiado estimó que es “indiscutible que varios niños donantes tienen similitudes en apariencia a Karbaat”.

Desde 2017 había antecedentes respecto a posibles malas prácticas del profesional, luego que cinco personas presentaran demandas por presunta intervención en procesos de fecundación asistida.

En ese momento, un tribunal aceptó obtener muestras de ADN de parte del médico, sin embargo, éstas se habían mantenido guardadas en una caja fuerte y no se les había permitido acceder a ella, debido a que jueces de un tribunal de apelación indicaron que no había suficiente evidencia en el caso.

Jan Karbaat trabajó en una clínica de Rotterdam por décadas, hasta que decidió abrir su propio centro de fecundación en la misma ciudad. Este recinto cerró en 2009, cuando comenzaron a salir las primeras críticas al especialista.

En ese momento hubo una denuncia por “abusos con óvulos donados y abusos administrativos”,
la que motivó el cierre del lugar.

En el último tiempo, la familia Karbaat no ha querido referirse al tema de forma pública, aunque se han mostrado a favor de colaborar con las posibles víctimas.