Un complejo caso médico quedó al descubierto en un hospital de la ciudad de Goyang (Corea del Sur), luego que un equipo retirara dos kilos en piedras, tapas de botellas y monedas desde el estómago de un paciente. Según detallaron los profesionales, el hombre sufría de ansiedad y comía estos objetos para controlarla.
La extracción de los objetos fue llevada a cabo el por cirujano Pyong Wha Choi, quien publicó detalles del procedimiento en la revista Journal of Medical Case Reports.
El doctor Choi indicó que el hombre de 57 años, que no fue identificado en el libro, llegó a mediados de enero hasta la emergencia del recinto, aquejado de fuertes dolores de estómago.
El escáner al que fue sometido una hora más tarde reveló que su estómago había sido ocupado íntegramente por objetivos contundentes, como piedras y monedas.
Luego de eso, el paciente explicó que las había estado ingiriendo durante la última semana debido a severos ataques de ansiedad, pese que llevaba a cabo un tratamiento con pastillas para controlar su comportamiento.
El médico explicó que, inicialmente, intentaron extraer los objetos desde el estómago mediante una gastroscopía, insertando un tubo delgado en el estómago a través de la boca. No obstante, este procedimiento falló debido a la gran cantidad de metales presentes en el organismo.
Debido a esto, al día siguiente tuvieron que realizar una cirugía, en la que accedieron a su estómago y retiraron una por una las piedras y otros elementos que allí estaban alojados.
“La cirugía era inevitable ya que había demasiados cuerpos extraños para extraer mediante endoscopia”, explicó el cirujano en la revista.
Luego de eso, el hombre fue enviado a hacer reposo por nueve días al Hospital de la Universidad Ilsan Paik, donde se recuperó satisfactoriamente.
“En el presente caso, a pesar de que el paciente no tuvo vómitos, la gran cantidad de piedras y monedas en su estómago le causaron dolor abdominal severo”, concluyó Choi.
Siete consejos para controlar la ansiedad
Hay distintos trastornos de ansiedad: de pánico, de ansiedad generalizada, de ansiedad social y fobia específica. En el caso de las crisis de pánico, estas se producen en forma espontánea y no por una razón específica, alcanzan su máxima expresión en pocos minutos. En estos pacientes siempre estará el temor de sufrir nuevas crisis.
En el trastorno de ansiedad generalizada la persona experimenta preocupaciones difíciles de controlar. Siempre se relacionan con temas personales.
El trastorno de la ansiedad social, el más frecuente entre los chilenos, se produce, ante situaciones sociales, en especial, cuando se está frente a personas desconocidas o de autoridad.
En el caso de la fobia específica, las personas experimentan un miedo extremo e irracional en respuesta a algo puntual como volar, las alturas, las arañas, etc. Se le considera un problema cuando impide una vida normal.
A continuación el doctor Roberto Amon nos entrega siete consejos para enfrentar la ansiedad y el estrés.
1.- Tómese entre 15 a 20 minutos para estar tranquilo, respirar profundo y pensar en una situación placentera.
2.- Aprender a aceptar las cosas que no pueden cambiar. Focalizar la atención en lo positivo.
3.- Es muy importante realizar actividad física, por lo menos, tres veces por semana.
4.- Llevar una dieta balanceada. Es vital limitar el consumo de cafeína, alcohol y tabaco porque favorece la ansiedad y afecta la calidad del sueño.
5.- Organice adecuadamente su tiempo y horarios. Aprenda a decir que NO.
6.- Sea tolerante y flexible.
7.- Sonría, una dosis regular de entusiasmo y humor es un poderoso antídoto contra el estrés.
