Alexis Bancroft quería simplemente comprar desayuno para sus hijos en un restaurant en Hotsprings, Arkansas, para no preocuparse de cocinar esa mañana, pero se llevó una desagradable sorpresa cuando la gerente del establecimiento IHOP le negó el servicio a su hijo discapacitado, William.
La razón, según Bancroft, es el hecho de que su hijo debe comer con sus pies, debido a que no posee brazos, y según la encargada sería
insalubre.
“Lo único que quería era comprar unos panqueques para ellos, no me esperaba esto”, afirmó al recontar la historia para el medio local KARK.
Indignada, Bancroft se llevó a su familia y se quejó directamente con la administración del restaurante. Otros clientes que estaban esperando su comida en ese momento decidieron apoyar a la mujer, saliendo del restaurante sin pagar en forma de protesta.
Bancroft compartió su experiencia a través de redes sociales, donde su publicación fue compartida más de 2000 veces.
Para su sorpresa, los empleados del restaurante vieron la publicación y se disculparon directamente con ella, admitiendo estar “avergonzados” por las acciones de la gerente.
La empresa IHOP rápidamente pidió disculpas a Bancroft, y puso a la gerente del restaurante en suspensión indefinida, sin embargo, ella admitió no sentirse contenta con este resultado.
“Se disculparon, me dijeron que no era intencional, pero mi hijo no puede recuperarse de esa experiencia tan fácil. Al otro día, quería intentar forzarse a comer de manera normal, algo que no puede hacer”, afirmó.
Por suerte, gracias al apoyo de su familia y comunidad, William ha vuelto a su rutina de antes.
“Hay algunos que quizás piensen que no es tanto problema, pero ese es mi hijo. Yo soy su cuidadora, y no vas a tratarlo así mientras yo este aquí”, finalizó Bancroft.
