¿Has pensando alguna vez en qué pasa por la mente de las mascotas que se quedan solas cuando sus dueños se ausentan por un tiempo largo? Ahora imagina que se trata de una situación que escapa de control, como la necesidad de estar hospitalizado varios días.

Con esa incertidumbre y en medio de la espera por su amo, una perrita llamada Boncuk se quedó a las afueras del hospital, esperando durante cinco días el momento en que su humano Cemal Senturk saliera por la puerta principal, según publicó la agencia de noticias DHA.

El pasado 14 de enero, cuando llegó la ambulancia a recoger a su dueño para trasladarlo al hospital de Trebisonda, ciudad ubicada junto al mar Negro en Turquía, Boncuk comenzó a correr tras el vehículo.

Aynur Egeli, hija de Senturk aseguró que podía regresarla a su casa, sin embargo, la perrita volvía a escaparse para estar en la entrada del hospital.

Su presencia se volvió el centro de atención entre los trabajadores del centro de salud, aunque su popularidad llegó más allá, provocando que tanto medios de comunicación como curiosos llegaran a verla. “Viene todos los días alrededor de las 9 am y espera hasta el anochecer. No entra. Cuando se abre la puerta, ella asoma la cabeza hacia adentro”, comentó Muhammet Akdeniz, guardia de seguridad del recinto.

Un final feliz

Cemal Senturk y su mascota cuando fue dado de alta | AP

Durante la jornada del pasado miércoles Senturk fue dado de alta, momento en que se reencontró con su mascota que lo esperaba pacientemente. Lo llevaron en silla de ruedas y, entre las miradas de la gente, pudo saludar a Boncuk otra vez, quien estaba impaciente por jugar con él.

“Ella está muy acostumbrada a mí. Y yo también la extraño”, comentó el hombre que ya se encuentra en su casa junto a su compañera.