Fue hace cinco años cuando Joe Kirk y su esposa, Schenley, fundaron el refugio de animales Hound Rescue & Sanctuary, en donde acogen a perros en situación de calle, ancianos, enfermos y que están apunto de ser sacrificados. Fue justamente así como encontraron a Gregory, un beagle al que le iban a aplicar eutanasia.
Al enterarse de esto, la pareja oriunda de Findlay (Ohio) fue a buscar al perro, al que sólo le restaban dos días para recibir la inyección letal. Tal como contó Kirk al sitio BoredPanda, el perrito fue diagnosticado de dirofilariasis (parásitos al corazón), una enfermedad que se contagia de otros animales o a través de la picadura de un mosquito, en la que los parásitos, en su etapa de madurez, se alojan en el corazón de la mascota hasta provocarle un paro cardíaco.
A pesar que Gregory tenía alto riesgo de morir, los rescatistas se lo llevaron en su automóvil para darle un nuevo destino. Fue ahí cuando Joe capturó una foto que conmovió a todo Internet: al darse cuenta que estaba siendo rescatado, el perro se acercó cariñosamente al hombre en un gesto que luce como un abrazo.
“Gregory es un beagle agradecido. Sabe que se siente seguro. Tiene parásitos en el corazón, y le vamos a dar un tratamiento, pero sabe que está en buenas manos. Se pondrá bien y recibirá todo el cariño que merece, y un buen futuro”, escribió el rescatista en ese entonces. “Sólo quería abrazar a Joe cuando estábamos en el auto, Gregory es muy cariñoso y afectuoso, le encanta estar a tu lado y dar besos”, añadió su esposa.
Pues esto sucedió en abril de 2018, cuando a Gregory le quedaban pocas esperanzas de vida y sólo tenía dos años de vida. Esta semana, Joe Kirk revivió la historia porque finalmente el beagle encontró un hogar y está totalmente sano.
“Tras finalizar su tratamiento, Gregory fue adoptado por una familia que lo adora, y disfruta de una vida feliz junto al otro beagle de la casa”, explicó.
Salvados de morir
Este no es el primer ni último caso de perro rescatado que tendrá el centro Hound Rescue & Sanctuary. Tal como cuentan en su pagina de Facebook, dicho lugar sirve de centro de rehabilitación para perros enfermos y en situación de calle, y de santuario para los que “nadie quiere”.
“También proporcionamos un santuario de por vida a los perros mayores y no aptos. Los retiramos de los refugios de alto riesgo y matanza: nuestra misión es salvar a los perros de la eutanasia. También nos conectamos con otros rescatistas e individuos para así encontrarles un hogar para siempre”, señalaron.
“Generalmente damos hogar y cuidamos a entre 25 y 30 perros a la vez. Tras salvar a Gregory de ser sacrificado, le dimos los cuidados veterinarios y el tratamiento que necesitaba”, detalló la pareja. “No hay nada más satisfactorio que darle seguridad, amor, alimento y cuidado a un perro”, concluyó.
