20 días de huelga completaron los trabajadores de uno de los sindicatos del proyecto Alto Maipo, quienes exigen mejoras salariales y mayor seguridad.

En conversación con el Podría Ser Peor el secretario general del sindicato, Alfredo Díaz, indicó que se encuentran en medio de una huelga reglada que comenzó “haciendo peticiones, bastante racional y normal, racional para este tipo de trabajo y este tipo de empresas y la respuesta ha sido insatisfactoria y negativa en cada uno de los puntos que se habían solicitado”.

Para díaz, las relaciones con la empresa se han quebrado producto de la negativa y poca voluntad para negociar por parte de la constructora .

“No hay una voluntad de negociar, no hay un ofrecimiento de negociación, por lo tanto estamos colocando solamente la voluntad los trabajadores”, precisó.

Ineficiencia en los artículos de seguridad, la vestimenta y las condiciones de hacinamientos que habrían en los campamentos, sumado a la desprotección en los trabajos de túneles, es lo que reclama el secretario, argumentando que es “un trabajo bastante peligroso, en el cuál no se está cumpliendo con lo que debiese exigir este tipo de contrato“.

Por otro lado, para el dirigente, el proyecto Alto Maipo, responde a una necesidad energética, pero no a sido bien dirigido.

“Estamos ciertos que es una necesidad de energía para el sistema interconectado y nos parece que es una necesidad que hay que llevarlo y solventarlo bien, lo malo es que es un tremendo proyecto de un impacto de primera línea y no ha sido bien llevado por las autoridades y la gerencia de manos extrajeras, no han conocido al parecer las leyes chilenas (…)tanto en el ámbito constructivo como administrativo“, dijo.

Lo que la huelga quiere, para finalizar el conflicto, según explicó Díaz es que la empresa “ponga de su parte y ponga algo en la mesa para discutirlo y poder ofrecerle una mejora a los trabajadores”.

Sin embargo, expresó que existen graves acusaciones por parte de la empresa en contra de los trabajadores movilizados, ya que alegan que los han acusado por “secuestro de gerente, por robo de equipo, por incendio de campamento, una serie de acusaciones infundadas“, argumentó.

Y agregó que “esto se ha tornado en una cantidad de falsedades, a ido PDI, fiscales, fuerzas especiales, con guanacos, zorrillos y se han encontrado con la realidad que es absolutamente distinta, o sea, unos trabajadores tranquilos esperando una solución al problema”, arguyó.

Según el dirigente, esta ha sido la tónica de la huelga: tranquila. Y manifestó que incluso, han cuidado las inmediaciones del lugar, “porque la empresa hizo abandono de las instalaciones, prácticamente nosotros estamos cuidando, cuidando un polvorín, polvorín que es un tema súper delicado (…)porque también nos acusaron de haber estado sacando material del polvorín, que prácticamente estamos hablando de sacar armamento de guerra“.

Ante estas acusaciones, Díaz declaró que “es una política del terror“.

Finalmente, hizo un llamado para que establecer acuerdos y ponerle punto final a esta situación.

“Quedamos abiertos a lo que nos puedan ofrecer y eso esperamos que nos ofrezcan algo y que esto termine porque ya llevamos más de 20 días en huelga, sin agua, sin luz, sin energía sin ningún elemento básico, por lo tanto estamos desconectados y necesitamos resolver este tema porque ya es casi insostenible”.

Escucha a continuación la entrevista realizada por Julio César Rodríguez en el Podría Ser Peor