El lunes comenzó a regir la ley de etiquetados en los alimentos y uno de los puntos conflictivos son los kioskos saludables que se implementaron a partir del martes en los establecimientos educacionales.

El objetivo es que a través de esta iniciativa los niños de recintos educacionales eviten adquirir alimentos que no son sanos para evitar la mala alimentación y el sobrepeso.

En conversación con Expreo Bío Bío, Constanza Pimentel, encargada del kiosko saludable del Colegio Silva Henríquez de la Fundación Belén Educa de Puente Alto, indicó que ha sido un cambio fuerte y que han trabajado en un plan colectivo entre profesores, alumnos y vendedores donde han tratado de alinearse para que no sea tan radical el cambio en los niños.

Añadió que estos nuevos alimentos han generado sorpresa en el alumnado y que ha sido divertido ver las reacciones. Según precisó Pimentel, tras este cambio en la alimentación, hubo más resistencia en los adultos que en los mismos niños.

Asimismo, explicó que todos los productos que venden son light y que tanto las jaleas como compotas son preparadas por personal del establecimiento, reencontrándose con lo natural de la alimentación.