La decisión del Frente Amplio (FA) de no postular la candidatura de Gustavo Gatica por el distrito 8 ha encendido un debate interno en el partido, esto a pesar del respaldo inicial de la presidenta del partido, Constanza Martínez.
Esta determinación no fue casual, sino el resultado de complejas negociaciones en las que el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic, jugó un rol decisivo, según informó La Tercera.
El debate
El debate se centró principalmente en la defensa de las candidaturas de la diputada Claudia Mix (militante FA y ex-Comunes) y la exconstituyente Tatiana Urrutia (también militante FA y exsecretaria general de Revolución Democrática, RD).
Vodanovic, aunque no es miembro del comité central, fue contactado por la dirigencia del partido para considerar su opinión, dada la importancia de la comuna que administra.
En esa instancia, el jefe comunal defendió la idea de dar prioridad a los militantes que han desarrollado un trabajo territorial de meses en ese distrito, independiente de los méritos personales y la emblemática situación de Gatica, quien perdió la vista por perdigones en el estallido social.
Esta postura resonó en varios sectores del FA, que admiten una desconfianza histórica hacia algunos candidatos independientes que, una vez electos, terminaron actuando con desmedida autonomía.
Escasez de cupos
En un comunicado interno, la directiva del FA declaró que “el comité central (del Frente Amplio) del 8 de agosto, entendiendo que Gustavo cuenta con opciones que aseguran su participación en la lista oficialista (…), es que ha decidido concurrir a la elección con candidaturas propias”.
La candidatura de Gatica, quien se postuló días antes de definir las prelaciones por cada zona electoral, se complicó aún más por la escasez de cupos que genera la lista única del oficialismo, que solo permite nueve candidatos para los nueve partidos de la alianza.
El distrito 8, la lista de candidatos del FA ya tenía cartas fuertes: la diputada Claudia Mix y Tatiana Urrutia, la candidata de Vodanovic que incluso había renunciado a su empleo para poder competir.
La tensión escaló cuando Martínez, se interesó por competir en el mismo territorio. En respuesta a esto, distintas facciones de la colectividad se unieron y amenazaron con bajar sus candidaturas en todo el país.
Ante esta situación, Martínez decidió declinar su candidatura para ceder su cupo a Gatica. Sin embargo, su decisión no fue suficiente para resolver el problema de cupos, y el FA finalmente privilegió a Mix y Urrutia.
Reacciones
La decisión generó un gran descontento. La diputada Emilia Schneider y el colectivo Marea Rosa declararon que no comparten esta resolución “y entendemos que generará desazón dentro y fuera de nuestro partido”.
Asimismo, el Frente Estudiantil del FA calificó la medida como “un portazo a nuestra historia”, y señaló que el partido estaba enviando un mensaje negativo a los movimientos sociales y de derechos humanos.
Por su parte, Martínez, abordó esta situación y, aunque defendió su postura inicial, respondió: “Represento a un partido que es diverso y que tiene espacios de deliberación, y por lo tanto a mí también me cabe ahora respetar la posición que ha tomado el partido y llevarla a cabo dentro de esa discusión”.
Además, señaló que no era el momento de hacer “un análisis personal”, sino de “respetar la posición que ha tomado el partido”. Sobre las razones del rechazo, se limitó a decir que eran “discusiones internas” y que no le correspondía dar “posiciones que son distintas a la mía”.
El futuro de Gatica
A pesar del rechazo del FA y la falta de ratificación del Partido Comunista —quienes también le habían ofrecido un cupo parlamentario a Gatica— el joven psicólogo agradeció de todas formas el apoyo.
“Agradezco el cariño de la gente y el interés político que ha suscitado esta candidatura. Como independiente, soy respetuoso de los procesos internos de los partidos comprometidos con la gobernabilidad que propone el lierazgo de Jeannette Jara”, comentó al medio.