Este viernes se dio a conocer la drástica decisión de la Municipalidad de Independencia de demoler un kiosko sin avisarle previamente a su dueña, quien hace meses habían invertido su 10% para remodelarlo en medio de la pandemia por COVID-19.

A través de redes sociales se viralizó el relato de Gladys, la dueña del kiosko destruido, quien entre lágrimas intentaba explicar lo sucedido. “Yo tenía un local hace más de 8 años, me dijeron que no lo podía atender por la pandemia, lo cerré lo enrejé. Y miren lo que quedó. Vino la municipalidad y lo sacó de cuajo, dentro tenía refrigerador, conservadora, horno, microondas. Y no quedó nada de mi local”.

Según lo explicó Gladys a Mega, vecinos fueron testigos de la destrucción del local por parte de personal de la Municipalidad de Independencia a quienes increparon y ellos respondieron, “‘la dueña del local dio la orden de sacarlo’, y yo no di ninguna orden, yo no he hablado con nadie, a mi nadie me llamó (…) Llegó Carabineros con dos camionetas de la Municipalidad, llegó Enel, para sacar el empalme, fueron tres instituciones que se unieron fríamente”, afirmó la mujer afectada.

Ante la delicada situación el alcalde de Independencia, Gonzalo Durán, se atribuyó el hecho, “quiero insistir que acá hay una responsabilidad grave de la municipalidad, de la que yo personalmente como alcalde me hago cargo y que tenemos que reparar”.

También agregó que “hay una obligación de contactar a la persona, de explicar la situación, de verificar cuáles son las alternativas (…) Nada de eso, a la luz de lo que estoy viendo en este minuto, se hizo”.

Finalmente, y según lo consignó el medio, el alcalde se comprometió a enmendar la demolición del kiosko de Gladys con un nuevo local además de los productos y electrodomésticos que se hallaban en un interior.