Más de 300 personas se congregaron el jueves 5 de marzo en una estación de servicio Copec ubicada en la autopista Costanera Norte al poniente, específicamente en el kilómetro 2 sector San Francisco -en la comuna de Vitacura- para participar en carreras clandestinas.

La actividad fue convocada por Speed Demons Chile, quienes se denominan como un “club de autos santiaguino” que fue formado en 2016 para “los amantes de la velocidad” y que actualmente tendría cerca de 50 integrantes. La organización es presidida por Hernán Calderón Argandoña, hijo de la figura televisiva Raquel Argandoña y el abogado Hernán Calderón.

Según consignó La Tercera, el club presidido por el estudiante de Derecho de la Universidad Andrés Bello mantiene una estricta reserva sobre sus integrantes y la manera de organizarse. En un principio se aceptaba a quienes tenían un Chevrolet Camaro, exigencia que luego se fue flexibilizando.

De acuerdo al medio, la agrupación -constituida principalmente por jóvenes profesionales que promedian 35 años y tienen alto poder adquisitivo- se junta todos los jueves tras coordinarse previamente por WhatsApp. Para ser parte del grupo no es necesario pagar mensualidad, pero sí es necesario comprar los productos que vende el mismo club como poleras, toldos y lentes que llevan su logo.

Además, suelen juntarse los jueves en lugares por definir, pero si un miembro falta dos veces sin avisar es expulsado. En un principio se reunían en el centro comercial Cantagallo y en el estacionamiento del mall Portal La Dehesa e Cencosud, sin embargo, comenzaron a ser echados de dichos lugares.

Uno de los integrantes del club señaló al medio que actualmente suelen reunirse en la estación Copec que está en la calzada norte de la Costanera Norte, en Vitacura. En tanto, aseguró que en una sola junta cruzan Santiago en sus vehículos y podrían llegar a gastar más de $100 mil entre bencina, TAG y productos.

“Cada vez que nos ve Carabineros nos echa en cuanto nos ve y cuando comienzan a partear, nos subimos y nos vamos”, relató uno de los integrantes de Speed Demons.

Municipio recibe reclamos

Debido a los ruidos y riesgos que provocan las carreras, la Municipalidad de Vitacura ha recibido una serie de reclamos por parte de los vecinos.

Incluso, el municipio se querelló por la carrera realizada el último jueves, sin embargo, fue desestimada porque debía ser presentada por una persona natural. Ante esto, comenzaron a recabar firmas de vecinos para obtener un patrocinio legal y presentar una nueva querella en contra de los organizadores.

El alcalde (s) de Vitacura, Galo Errázuriz, señaló que “mientras no se endurezcan las penas, la gente que participa en estas carreras se ríe un poco cuando las infraccionan por la Ley del Tránsito. Hace años que se discute la tipificación de la carrera clandestina como delito y una de las penas podría ser que les quiten el auto”.

En tanto, el fiscal de Costanera norte, Héctor Avendaño, indicó que “concurrimos con nuestros móviles al lugar, pero lamentablemente muchas veces nuestro personal de seguridad vial ha sido agredido por los propios automovilistas”.

Por otro lado, Copec declinó referirse a la situación.