El Instituto Nacional de Derechos Humanos reaccionó ante las declaración que emitió el general directo de Carabineros, Mario Rozas, en las que indicó que los funcionarios involucrados en las agresiones a Fabiola Campillai y Gustavo Gatica, siguen cumpliendo labores en la institución.

Rozas, señaló que la información de los carabineros que estarían involucrados en las agresiones que afectaron Gatica y Campillai ha sido puesta a disposición del Ministerio Público.

Además, indicó que “por supuesto que están trabajando, porque todavía no hay ninguna acusación, por lo tanto seguimos aportando y seguimos cooperando con el Ministerio Público”.

El director de la organización, Sergio Micco, indicó que el Instituto Nacional de Derechos Humanos “está profundamente extrañados” con el hecho de que los carabineros que están involucrados en ambos casos sigan cumpliendo funciones.

“Evidentemente cuando un carabinero es acusado de violar gravemente los derechos humanos, la institución debe iniciar una investigación sumaria ¿Cuáles son las alternativas tras tomar estas medidas? La primera es dar de baja y luego, si la investigación sumaria demuestra que no hay responsabilidad, reintegrar. La segunda posibilidad es redestinar a una persona desde las funciones operativas a las administrativas”, añadió.

Sumado a esto, indicó que la tercera opción es suspender al funcionario, mientras que la cuarta es “no hacer nada”. “Pareciera ser que en este caso se optó por esta cuarta que es la peor de todas. Esto causa conmoción pública y produce justamente aquello que los chilenos no queremos seguir sintiendo que es miedo”, indicó.

“Estamos profundamente extrañados y confundidos. Quisiéramos que el cuerpo de Carabineros fijara un solo criterio por razones de seguridad jurídica y también por razones de confianza pública”, añadió.