Una treintena de fieles llegaron la mañana de este sábado hasta la Parroquia de la Asunción, que fue atacada, saqueada y vandalizada la tarde de este viernes en Santiago.

Las personas llegaron hasta Vicuña Mackenna con Marcoleta para remover los escombros de las bancas que fueron usadas para encender barricadas en el sector y a resguardar las pocas imágenes religiosas y relicarios que quedaron.

El interior del templo fue vaciado prácticamente por completo, y los espacios rayados con diversas consignas. Los daños todavía no han sido cuantificados.