El robo de energía eléctrica sigue siendo una realidad y no solo en sectores marginales del país. Sin ir más lejos, Enel detectó varios casos en los sectores más acomodados de la capital.

Así fue revelado en un reportaje de TVN, cuyo equipo periodístico participó en un operativo de la empresa eléctrica destinado a desenmascarar a quienes tenían intervenidos sus medidores para pagar menos o simplemente no pagar.

Según Enel, cada año se producen en promedio 6 mil casos de hurto de energía en el Gran Santiago, los que son detectados gracias a un software que analiza el consumo de cada medidor y alerta variaciones notorias entre uso y el costo de la cuenta.

Por ejemplo, uno de los lugares donde se halló hurto de energía eléctrica fue en una casa ubicada en el Camino Los Espinos, del exclusivo sector de La Dehesa en la comuna de Lo Barnechea.

En dicho sector, en cada vivienda se suelen pagar más de $100 mil mensuales por concepto de luz, ya que suelen ser propiedades con cercos eléctricos y piscinas temperadas. Sin embargo, en la casa en cuestión solo pagaban $20 mil: había una conexión irregular.

Ante la fiscalización, una de las habitantes del hogar señaló al canal de televisión que “no hay ningún delito, qué mierda les pasa. A nosotros nadie nos dijo nada, no nos llamaron”. En tanto, un hijo de un dueño de casa explicó que la situación no sería intencional y se produjo cuando su padre instaló un nuevo panel para el jacuzzi.

Si bien en estos casos lo que corresponde es llamar a Carabineros para que se lleve detenido al responsable, en esta oportunidad no se permitió el acceso de la policía a la vivienda, por lo que solo quedaron citados a Fiscalía.

Locales comerciales

Estos casos no solo se dan en viviendas particulares, sino también en locales comerciales de la zona oriente. Es el caso de dos botillerías ubicadas en el caracol de la discoteca Eve en Vitacura, las que tienen el mismo dueño.

Según detectó la empresa, en febrero de 2018 tenían una cuenta de luz que rondeaba los $300 mil. Sin embargo, ya cumplieron 16 meses pagando solo $1.500 por el servicio.

Aquí la situación era más preocupante ya que los medidores de los locales comerciales se encontraban en un subterráneo, lo que podía suponer un riesgo para el recinto donde opera la discoteca.

El dueño de ambos locales, Carlos Andrade, dijo desconocer la intervención del medidor, pero igualmente se fue detenido por Carabineros.

Algo similar se detectó en el restaurante Taberna Sátira de Lo Barnechea, donde el hijo de la dueña explicó que la situación era incomprensible ya que solo gastaban en iluminación.

Sin embargo, en mayo la cuenta de la luz fue de $260 mil y desde junio en adelante empezó a salir por menos de $150 mil.

La dueña, que señaló al personal de Enel que “no me venga a decir que eso está adulterado porque yo jamás he tocado un medidor”, sorpresivamente no se fue detenida pese a que personal de Carabineros ingresó a su local para concretar el procedimiento.

Bellavista

El reportaje termina con una visita al bar Roots, ubicado en el barrio Bellavista, donde Enel detectó que el medidor tenía la misma lectura desde hace 12 meses.

Ante las consultas, el administrador dijo que no tenía conocimiento de una intervención del medidor y que pagaba $320 mil. Sin embargo, al traer sus cuentas salía que pagaba la módica suma de $600. Finalmente, se fue detenido.

Según TVN, todos los involucrados fueron formalizados por hurto y se les cobrará retroactivamente la luz gastada.