El alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, respaldó la decisión del Instituto Nacional de expulsar a un estudiante de segundo medio -supuestamente- por haber sido sorprendido lanzando una bomba molotov el 15 de mayo pasado.

Esto, pese a que el parte de Carabineros señala otros hechos, que incluso llevaron a la Fiscalía a no iniciar una investigación contra el menor.

Pasando por alto el informe policial, el alcalde Alessandri indicó que la Dirección de Educación Municipal realizó un proceso correcto y ajustado a derecho, agregando que sería lamentable que la justicia revierta la sanción, en caso que el estudiante recurra a la Corte de Apelaciones de Santiago, como señaló su abogado.

El abogado del estudiante, Ramón Sepúlveda, sostuvo que el parte de Carabineros habla de desórdenes en la vía pública, consistentes en lanzar objetos contundentes a personal policial, obstaculizando el normal tránsito vehicular, pero no hace referencia al lanzamiento de bombas molotov, como sostiene el colegio.

Además, el abogado del estudiante agregó que no se respetaron los plazos que la propia ley Aula Segura estipula para la notificación, que son 10 días, por lo que solicitaron al Instituto Nacional una reconsideración de la medida, como paso previo antes de judicializar la medida adoptada por el emblemático establecimiento.